La Guerra de Ultramar: Causas, Desarrollo y Consecuencias

La Guerra de Ultramar

Causas de la Guerra

Tras la Paz de Zanjón (1878), los cubanos esperaban reformas que les otorgaran los mismos derechos políticos que a los españoles peninsulares, incluida la abolición de la esclavitud. Sin embargo, estas peticiones fueron ignoradas por la administración española.

Desarrollo de la Guerra

En 1895, el Grito de Baire inició un levantamiento generalizado en Cuba. El gobierno español envió un ejército al mando del general Martínez Campos, pero no logró controlar la rebelión. Fue sustituido por el general Valeriano Weyler, quien implementó una feroz represión.

La guerra se desarrolló en la selva, donde las fuerzas cubanas se concentraban y dispersaban rápidamente. Los soldados españoles no estaban entrenados para este tipo de guerra y sufrieron grandes pérdidas por enfermedades tropicales.

Intervención de Estados Unidos

Estados Unidos tenía un gran interés económico en Cuba y apoyó a los insurgentes con armas y suministros. En 1898, el hundimiento del acorazado Maine en el puerto de La Habana provocó la declaración de guerra de Estados Unidos a España.

Consecuencias de la Guerra

La guerra terminó con la Paz de París (1898), por la cual España perdió Cuba, Puerto Rico y Filipinas, que pasaron a ser protectorados estadounidenses. El ejército español regresó vencido y en condiciones lamentables.

Crisis Política y Moral

La derrota en la Guerra de Ultramar provocó una grave crisis política y moral en España. El sistema de la Restauración sobrevivió, pero algunos gobernantes intentaron aplicar ideas regeneracionistas.

La crisis del 98 fue principalmente una crisis moral e ideológica que causó un profundo impacto psicológico en la población. La derrota destruyó el mito del imperio español y llevó a una visión pesimista del futuro del país.

Regeneracionismo y Generación del 98

Los regeneracionistas abogaron por mejorar la situación del campo español y elevar el nivel educativo y cultural del país.

Un grupo de literatos y pensadores conocidos como la Generación del 98 analizaron críticamente los problemas de España y propusieron una regeneración social, moral y cultural.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *