La Restauración Borbónica en España: De la Constitución de 1876 a la Segunda República

La Restauración Borbónica en España (1875-1931)

Constitución de 1876

Cánovas del Castillo, figura clave de la Restauración, buscó mantener la legitimidad monárquica, tomando como base la Constitución de 1869. La Asamblea Constituyente fue elegida por sufragio universal masculino (mayores de 25 años). Presidida por Manuel Alonso Martínez, la Constitución fue obra de Cánovas. Si bien se inspiraba en la de 1869, incorporaba elementos del pensamiento conservador de Cánovas.

Contenido:

  • Forma de Estado: Monarquía moderada hereditaria.
  • Poder Ejecutivo: Residia en el Rey, asesorado por un Consejo de Ministros sujeto a control parlamentario.
  • Poder Legislativo: Compartido entre el Rey y las Cortes. El Rey convocaba y disolvía las Cortes, tenía iniciativa legislativa y poder de veto.
  • Confesionalidad: Religión oficial católica, con reconocimiento de la libertad de culto (siempre que fuera público).
  • Derechos: Recogía derechos individuales y colectivos.
  • Ideología: Liberal-conservadora, con un marcado carácter conservador que le otorgaba flexibilidad.

El Sistema Canovista: Alternancia y Caciquismo

Las elecciones se manipulaban para asegurar la alternancia en el poder entre el Partido Conservador (Cánovas) y el Partido Liberal (Sagasta). El sistema se basaba en el encasillado, donde se predeterminaba quién ganaría en cada distrito. Se recurría a prácticas como los lázaros crucificados (votos de difuntos) y la manipulación de las listas electorales.

Sagasta y el Partido Liberal Fusionista

Sagasta formó el Partido Constitucionalista, que luego se fusionaría con el Partido Progresista, dando lugar al Partido Liberal Fusionista. En 1881, durante su primer gobierno, reguló la libertad de asociación. Tras la muerte de Alfonso XII en 1885, Sagasta y Cánovas pactaron el apoyo a la regente María Cristina y la continuidad del sistema de alternancia. Sagasta impulsó medidas como la Ley de Asociaciones (1887) que permitió la legalización del PSOE y una nueva Ley de Prensa.

La Dictadura de Primo de Rivera (1923-1930)

En 1923, el General Primo de Rivera dio un golpe de Estado con el apoyo de Alfonso XIII. Se instauró una dictadura que suspendió la Constitución y las garantías constitucionales. El Directorio Militar (1923-1925) fue sustituido por el Directorio Civil (1925-1930).

Medidas de la Dictadura:

  • Suspensión de la Constitución y las Cortes.
  • Prohibición de partidos y sindicatos.
  • Creación de un partido único: Unión Patriótica.
  • Represión del nacionalismo catalán.
  • Intervencionismo en la economía.
  • Obras públicas para reducir el paro.

Caída de la Dictadura:

La dictadura cayó debido a la oposición de diversos sectores: partidos políticos, intelectuales, movimiento obrero, estudiantes universitarios y la crisis económica de 1929.

De la Monarquía a la República

Tras la caída de Primo de Rivera, se intentó volver a la normalidad constitucional con los gobiernos de Berenguer y Aznar. Sin embargo, la situación era insostenible. Las elecciones municipales del 12 de abril de 1931 se convirtieron en un plebiscito a favor de la República. Alfonso XIII abandonó España y se proclamó la Segunda República.

La Segunda República Española (1931-1939)

Constitución de 1931

Aprobada el 9 de diciembre de 1931, la Constitución de 1931 fue presidida por Julián Besteiro y la comisión constitucional por Jiménez de Asúa. De ideología izquierdista, establecía:

Contenido:

  • Forma de Estado: República, organizada en régimen de libertad y justicia.
  • Soberanía: Popular.
  • Separación de Poderes: Ejecutivo (Presidente de la República y Jefe de Gobierno), Legislativo (unicameral) y Judicial (con un Tribunal de Garantías Constitucionales).
  • Laicismo: Separación Iglesia-Estado.
  • Derechos y Deberes: Amplio catálogo de derechos, incluyendo el matrimonio civil, el divorcio, la igualdad de los hijos, la educación laica y estatal.
  • Organización Territorial: Reconocimiento de las Comunidades Autónomas.
  • Propiedad Privada: Posibilidad de expropiación con indemnización.

El Bienio Reformista (1931-1933)

El primer gobierno republicano, presidido por Niceto Alcalá-Zamora y con Manuel Azaña como jefe de gobierno, llevó a cabo importantes reformas:

Reforma Militar (Azaña):

  • Juramento de fidelidad a la República.
  • Eliminación de la Ley de Jurisdicciones.
  • Unificación de escalas.
  • Prioridad a los ascensos por estudios.
  • Supresión de tribunales de honor y grados intermedios.
  • Cierre de la Academia Militar de Zaragoza.

Reforma Educativa (Federico de los Ríos):

  • Erradicación del analfabetismo.
  • Construcción de escuelas.
  • Mejora salarial de los maestros.
  • Escuela pública, gratuita, mixta y laica.
  • Misiones Pedagógicas.

Reforma Laboral (Largo Caballero):

  • Jornada de 8 horas.
  • Convenios colectivos.
  • Ley de Laboreo Forzoso.
  • Ley de Terrenos Municipales.

Reforma Agraria (Marcelino Domingo):

  • Cambio de la propiedad de la tierra.
  • Modernización del cultivo.
  • Expropiación de tierras.
  • Creación del Instituto de Reforma Agraria (IRA).

Conclusión

La Restauración Borbónica, con su sistema de alternancia y caciquismo, sentó las bases de un periodo convulso en la historia de España. La Dictadura de Primo de Rivera, lejos de solucionar los problemas, agravó la crisis. La Segunda República, con su ambicioso programa de reformas, se enfrentó a numerosos obstáculos que finalmente desembocaron en la Guerra Civil.

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