La Segunda República: Constitución de 1931 y el Bienio Reformista
La Segunda República
Tras las elecciones municipales de 1931 se proclamó la Segunda República. Ante el triunfo de los republicanos, el rey Alfonso XIII se exilió en Italia. Los republicanos contaban con el apoyo de la mayoría de los intelectuales, las clases medias y una parte importante del movimiento obrero.
El comité revolucionario creado en el Pacto de San Sebastián (1930) se convirtió en el primer gobierno provisional de la República. Estaba compuesto por:
- Republicanos conservadores (Niceto Alcalá Zamora, que fue su presidente).
- Republicanos de izquierdas (Manuel Azaña).
- Republicanos radicales (Alejandro Lerroux).
- Socialistas del PSOE (Francisco Largo Caballero).
- Nacionalistas catalanes y gallegos.
Los primeros decretos aprobados durante la república reconocieron amplios derechos individuales, proclamaron la amnistía y sentaron las bases de las reformas agraria, educativa, militar y laboral. La agitación anticlerical fue una respuesta violenta a la pastoral del cardenal Segura, en la que se hacía un elogio a la monarquía. La imagen de la Segunda República quedó deteriorada.
La Constitución de 1931
El fin primordial del gobierno provisional era la reunión de Cortes Constituyentes. Con una alta participación, proporcionaron un claro triunfo a la coalición republicano-socialista.
El 9 de diciembre, las Cortes aprobaron una nueva constitución, que tenía un marcado carácter democrático y progresista. España se definió como una república democrática de trabajadores de toda clase. España se constituyó en un Estado integral, aunque admitía que hubiese autonomías. Se estableció la separación de poderes (legislativo, ejecutivo y judicial).
- El presidente de la República era elegido a través de las Cortes por un periodo de 6 años. No podían ocupar el cargo militares, eclesiásticos ni miembros de la familia real.
- El jefe de gobierno, formado por el Consejo de Ministros, era responsable ante las Cortes, que podían retirarle su confianza en cualquier momento.
- Las Cortes tenían el poder legislativo y de control del ejecutivo, formadas por una sola cámara.
- El poder judicial se confiaba a unos jueces independientes.
Se estipuló el sufragio universal, también para las mujeres por primera vez en España, directo y secreto. Se establecía el voto a los 23 años.
En materia religiosa, el Estado se declaró laico, estableciendo la separación de la Iglesia y el Estado y suprimiendo la retribución al clero. Apareció como obligación del Estado extender la educación.
Se proclamó la igualdad de todos los españoles ante la ley y se recogió una amplia declaración de derechos y libertades individuales.
El Bienio Reformista (1931-1933)
Una vez aprobada la Constitución, las Cortes eligieron presidente de la República a Niceto Alcalá Zamora y a Manuel Azaña como presidente del gobierno. Contó con el apoyo de todos los partidos del gobierno provisional, excepto de los radicales de Alejandro Lerroux.
Durante el Bienio Reformista se llevaron a cabo las siguientes reformas:
- La reforma del problema regional: en 1932 se aprobó el Estatuto de Cataluña, por el cual se reconocía a los catalanes el derecho a tener gobierno autónomo propio (la Generalitat), presidente (Macía) y parlamento propio (Companys).
- Reformas sociales y laborales: se instituyó la jornada de 8 horas, el derecho a la huelga, el aumento de los salarios y la creación de seguros sociales.
- Reforma educativa: se marcó el objetivo de reducir el analfabetismo, se planificó la creación de escuelas y se promovió una educación liberal y laica, con un modelo de escuela mixta, pública, obligatoria y gratuita.
- Reforma militar: tenía como finalidad modernizar el ejército y mejorar su preparación y efectividad. Se aprobó la Ley Azaña, que permitía a los generales y oficiales retirarse, incluso con el sueldo íntegro, si no juraban fidelidad a la República.
- Reforma Agraria: en 1932 se aprobó la Ley de Bases de la Reforma Agraria, con la oposición de los terratenientes y de la antigua nobleza. Se creó el Instituto de Reforma Agraria, que se encargó de la expropiación de las tierras, previa indemnización.
El gobierno republicano-socialista tuvo que enfrentarse a huelgas de obreros y campesinos y a hechos violentos como el de Casas Viejas (Cádiz), un alzamiento anarquista que terminó con más de 10 muertos.
Oposición al Gobierno Republicano-Socialista
La oposición al gobierno republicano-socialista se concretó alrededor de:
- José María Gil Robles, fundador de la CEDA, bajo el lema: Religión, Patria, Familia, Propiedad y Orden.
- El grupo monárquico Renovación Española, liderado por José Calvo Sotelo.
- José Antonio Primo de Rivera, fundador de la Falange Española (1933), de inspiración fascista.
- El veterano partido de centro derecha, el Partido Radical (Alejandro Lerroux).
- El ala más radical y revolucionaria de la CNT, alrededor de la Federación Anarquista Ibérica, que defendía la vía insurreccional y armada.
- El Partido Comunista de España (PCE).