La Segunda República Española: Reformas, Polarización y Camino a la Guerra Civil

Las Reformas Iniciales de la Segunda República (1931)

Proclamada la II República el 14 de abril de 1931, se constituyó un Gobierno Provisional que inició una serie de reformas con carácter de urgencia:

  • Reformas Socio-laborales

    Tenían como objetivo mejorar las condiciones laborales de los trabajadores y fortalecer la posición de la clase obrera. Las medidas más importantes fueron la aprobación de la Ley de Contratos de Trabajo y el seguro de retiro.

  • La Reforma Agraria

    Tenía como objetivo acabar con el latifundismo, el absentismo y la miseria de los jornaleros, así como superar el atraso del campo español. Algunas de las medidas que se tomaron fueron: la aprobación de Decretos iniciales, la imposición de la jornada laboral máxima de 8 horas y el salario mínimo, y la obligación de puesta en cultivo de las tierras aptas.

  • La Reforma Religiosa

    Tenían como objetivo limitar la influencia eclesiástica y secularizar la vida social. Para ello, se tomaron medidas como la no confesionalidad del Estado, la libertad de culto, la supresión del presupuesto de culto y clero, la admisión del divorcio y del matrimonio civil, la aprobación de la Ley de Congregaciones y la expulsión de los jesuitas.

  • La Reforma Militar

    El objetivo principal era crear un ejército profesional y democrático, pero también modernizar su estructura y organización y someterlo a la autoridad civil. Para ello, se tomaron medidas como: la Ley de retiro de la oficialidad (Ley Azaña), la sustitución de las Capitanías Generales por Divisiones Orgánicas, la reordenación de academias militares y la supresión de algunos rangos, entre otras.

  • La Reforma Territorial

    Tenía como objetivo principal integrar los nacionalismos periféricos. Para ello, se tomaron medidas como conceder a Cataluña en 1932 el Estatuto de Autonomía con un Gobierno autónomo (Generalitat). En el País Vasco, el proyecto de Estatuto elaborado inicialmente fue rechazado por las Cortes por considerarse poco democrático, y el estatuto gallego sería pospuesto.

  • La Reforma Educativa

    Su objetivo era crear una educación laica, pública y generalizada, y mejorar las condiciones de trabajo de los maestros. Para ello, se tomaron medidas como crear un nuevo sistema educativo que concebía la educación como un derecho y la escuela primaria como obligatoria, gratuita, laica y mixta. Se aumentó significativamente el presupuesto destinado a educación y la creación de escuelas.

En resumen, la República fue recibida con entusiasmo popular ante el ambicioso programa de reformas que abordó, consideradas necesarias para modernizar el Estado, la economía y la sociedad española.

Polarización y el Frente Popular (1934-1936)

La Revolución de Octubre de 1934 provocó una fuerte polarización política y una radicalización de posiciones, tanto en la izquierda como en la derecha. La izquierda impulsó una concentración de fuerzas que desembocó en la creación del Frente Popular. También contribuyó a ello el avance del fascismo en Europa y la recomendación de la Internacional Comunista de formar frentes antifascistas.

Tras la experiencia del fracaso electoral de 1933, que dio paso al Bienio Conservador (o radical-cedista), la izquierda comprendió la necesidad de unir sus fuerzas en las elecciones de febrero de 1936 contra la reacción de derechas y para conseguir una amnistía para los represaliados de 1934. En consecuencia, se configuró el Frente Popular, que agrupaba a republicanos de izquierda, socialistas, comunistas y otras fuerzas progresistas.

La victoria electoral fue para el Frente Popular, que basó su triunfo en las grandes ciudades y las provincias del sur y la periferia mediterránea y cantábrica. La derecha triunfó en el norte y el interior del país. El nuevo gabinete, presidido inicialmente por Manuel Azaña, tomó las siguientes medidas:

  1. Se decretó una amnistía para los represaliados por los sucesos de 1934 y se facilitó su reingreso a los puestos de trabajo.
  2. Se restauró el Estatuto de Autonomía de Cataluña, suspendido tras octubre de 1934.
  3. Se impulsó la tramitación de nuevos estatutos de autonomía, como el de Galicia (aprobado en plebiscito en junio de 1936) y el del País Vasco (que se aprobaría ya iniciada la Guerra Civil).
  4. Se reanudó el proceso reformista interrumpido durante el bienio anterior, especialmente la reforma agraria.
  5. Se procedió al alejamiento de Madrid de generales considerados hostiles a la República: Franco (destinado a Canarias), Mola (a Navarra) y Goded (a Baleares).
  6. El Congreso de los Diputados destituyó al presidente de la República, Niceto Alcalá Zamora, por considerar irregular la última disolución de las Cortes, siendo elegido Manuel Azaña como nuevo presidente en mayo de 1936.

Mientras la izquierda obrera (especialmente sectores anarquistas y socialistas) adoptaba posturas más revolucionarias, sectores de la derecha (monárquicos, cedistas, falangistas) y del ejército conspiraban para derrocar al gobierno del Frente Popular. La conspiración militar avanzaba, con una trama política y otra militar entrelazadas, bajo la dirección principal del general Mola desde Pamplona.

El Alzamiento Militar y su Contexto (Julio 1936)

El texto al que se hace referencia en el documento original corresponde al manifiesto firmado por el entonces Comandante General de Canarias, Francisco Franco, en Santa Cruz de Tenerife el 18 de julio de 1936, y publicado en el diario La Provincia de Las Palmas de Gran Canaria cuatro días después. Este manifiesto es uno de los bandos que justifican el golpe de Estado.

En él, el General Franco se dirige a los españoles haciendo un llamamiento a defender la patria, que describe como inmersa en una situación crítica. En el primer párrafo, enumera los supuestos males que achaca al gobierno republicano: el desorden, la anarquía y las huelgas revolucionarias que, según su visión, impedían la normalidad. En el segundo párrafo, señala como culpables a los que denomina “explotadores de la política” y “engañadores del obrero honrado”, refiriéndose al conjunto de la clase política republicana. Finalmente, erigiéndose en portavoz de España, declara la intención de las Fuerzas Armadas de ‘salvar la patria’, anunciando una represión enérgica contra quienes se opusieran al alzamiento.

Contexto del Alzamiento

La situación española se enmarcaba en un contexto internacional complejo. La Guerra Civil Española es a menudo considerada un preludio de la Segunda Guerra Mundial. Factores como la crisis económica de 1929 y su impacto social, la creciente tensión ideológica, las secuelas no resueltas de la Primera Guerra Mundial y el temor en ciertos sectores conservadores a una revolución comunista (similar a la rusa de 1917) contribuyeron al desprestigio de las democracias liberales, a una radicalización política generalizada y al auge de ideologías totalitarias (fascismo y comunismo) en Europa.

A nivel interno, diversas circunstancias acumuladas explican el clima previo al conflicto:

  • La reforma militar impulsada por Manuel Azaña durante el Bienio Reformista (1931-1933) generó un profundo malestar en amplios sectores del ejército, que se sintieron agraviados.
  • La polarización social y política se había agudizado enormemente tras la Revolución de Octubre de 1934 y la victoria del Frente Popular en 1936.
  • El clima de violencia política era creciente, culminando en hechos como el asesinato del líder derechista José Calvo Sotelo el 13 de julio de 1936, en represalia por el asesinato previo del teniente José Castillo (instructor de milicias socialistas), que actuaron como catalizador inmediato para la sublevación militar planificada.

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