La transición democrática es el proceso de restablecimiento de las instituciones democráticas que tuvo lugar en España entre 1975 y 1982. Comenzó con la muerte de Franco y la proclamación de Juan Carlos I como rey y jefe del Estado, lo que supuso la restauración de la monarquía borbónica. La victoria electoral del PSOE (1982) ha sido generalmente aceptada como el fin de la Transición. Dentro de la Transición destaca el quinquenio 1975-1979, una etapa constituyente en la que se diseñó el actual Estado español. La Transición tuvo las siguientes características:
- Una evolución controlada del franquismo hacia la democracia, no se produjo una ruptura clara entre ambos sistemas, se fue alterando el sistema anterior sin reemplazar a quienes ostentaban el poder en la legalidad franquista.
- Fruto del acuerdo y el consenso, se trató de un pacto entre algunos dirigentes y políticos franquistas y de la oposición.
- Aunque se basó en pactos entre políticos, la opinión pública influyó decisivamente para que se produjeran cambios sustanciales.
El Reinado de Juan Carlos I y el Gobierno de Arias Navarro
Tras el juramento de Juan Carlos de Borbón como rey el 22 de noviembre de 1975, el antiguo presidente del gobierno, Carlos Arias Navarro, fue confirmado en su cargo un mes después; su continuidad pareció señalar el camino de un franquismo sin Franco. Este proyecto fracasó por el enfrentamiento entre Arias Navarro y el rey, partidario de una democratización plena. La actividad opositora y la politización de la vida pública se fueron incrementando. La oposición se aglutinó en la Junta Democrática y en la Plataforma de Convergencia Democrática. Ambos grupos se unieron formando Coordinación Democrática, un organismo de la oposición antifranquista.
En Cataluña, la oposición formó la Assemblea de Catalunya. Finalmente, Arias Navarro, presionado por el monarca, dimitió en julio de 1976. El nuevo presidente fue elegido por el rey entre tres candidatos, propuestos por el Consejo del Reino y finalmente se eligió a Adolfo Suárez.
El Gobierno de Adolfo Suárez (Julio 1976 – Junio 1977)
La primera etapa del gobierno de Suárez (Julio 1976-Junio 1977) presentó las siguientes características:
Las circunstancias del momento fueron decisivas para la restauración de la democracia en España.
- Se logró el asentamiento de los herederos del régimen franquista al proceso de reforma. Este gobierno promovió la Ley para la Reforma Política, que establecía unas nuevas Cortes Bicamerales (Congreso y Senado), esta ley fue aprobada en referéndum el 15 de diciembre de 1976. El gobierno quedaba facultado para convocar elecciones.
- Más tarde, se obtuvo también la conformidad de la oposición con el proceso de reforma. En enero de 1977, el principal problema era la legalización de los partidos. El gobierno tenía dificultades para legalizar el PCE, Suárez lo legalizó en Semana Santa con el desconcierto de todos. Como consecuencia, se produjeron numerosas dimisiones y protestas. El PCE renunció a la bandera republicana y se comprometió a acatar la monarquía.
- Los partidos nacionalistas, tanto en el País Vasco como en Cataluña, tuvieron mucha influencia. En el País Vasco se constituyó la coalición Herri Batasuna, fachada política de las actividades terroristas de ETA. En Cataluña se formó la coalición Convergencia i Unió liderada por Jordi Pujol, a ellos se les unió los partidos nacionalistas o regionalistas de Galicia, Andalucía y Valencia.
- Finalmente, el 15 de junio de 1977, se celebraron las primeras elecciones democráticas desde 1936. El recuento de votos y la repartición de escaños se realizaron conforme a la ley D’Hondt.
Las Primeras Elecciones Democráticas y el Gobierno de UCD
La formación política ganadora fue la UCD, de Suárez. Desde entonces, las contiendas electorales se dividieron en dos grandes partidos: uno de centro-izquierda y otro de centro-derecha.
Tras las elecciones, la UCD tuvo tres objetivos primordiales: elaborar una nueva constitución, construir el Estado de las Autonomías y gestionar una política económica de urgencia para paliar los efectos de la crisis energética mundial. En la fase constituyente de la Transición predominó la política de acuerdos (el llamado consenso), que permitió firmar los Pactos de la Moncloa, restablecer la Generalitat en Cataluña y aprobar la Constitución.
La Constitución Española de 1978
El diseño del texto constitucional se fundamentó en el consenso, una ponencia formada por siete miembros redactó un anteproyecto que se debatió en las Cortes (mayo-octubre de 1978). La Constitución fue aprobada en referéndum el 6 de diciembre y promulgada el 24 de diciembre de 1978. El texto constitucional contiene los siguientes principios:
- España es un Estado democrático.
- La soberanía nacional reside en el pueblo español.
- La forma de Estado es la monarquía parlamentaria.
- La unidad de España es compatible con la pluralidad nacional.
El Estado español es unitario, es decir, no es federal, pero tampoco centralista, sino autonómico. El rey es el jefe del Estado, es inviolable y no está sujeto a responsabilidad y tiene también el mando supremo de las Fuerzas Armadas.
En la sucesión a la jefatura del Estado se favorece al varón sobre la mujer. El poder legislativo reside en dos cámaras: Congreso de los Diputados y el Senado, elegidos por sufragio universal. El Congreso tiene mayor peso en la aprobación de leyes, el Senado tiene carácter de representación territorial. El poder ejecutivo reside en el Gobierno y el poder judicial corresponde a los juzgados y tribunales.
En la Constitución se recoge una declaración de derechos y libertades muy avanzada. Esta Constitución incluye numerosos derechos de carácter social y económico. La Constitución Española es muy moderada con respecto a la no confesionalidad ya que protege las creencias religiosas y su promoción a través de la educación. La organización territorial del Estado está diseñada de una forma ambigua: pueden modificarse las competencias.
El Estado de las Autonomías
El nivel de desarrollo económico queda sujeto a la capacidad de negociación de cada comunidad autónoma y al equilibrio de fuerzas políticas de cada momento. El texto constitucional admite la desigualdad entre las comunidades autónomas al distinguir las “nacionalidades” del resto de las regiones. Se establecieron dos vías para crear comunidades autónomas:
- El artículo 151, permitía el acceso directo de competencias tras la aprobación en referéndum de un Estatuto de Autonomía.
- El artículo 143, estas comunidades asumían todas las competencias en el plazo de cinco años sin referéndum.
El 25 de octubre de 1979 se aprobaron en referéndum los primeros Estatutos de Autonomía de Cataluña y el País Vasco.
En Euskadi ganó el PNV con Carlos Garaikoetxea y en Cataluña el triunfador fue CiU con Jordi Pujol.
En Galicia se aprobó en diciembre de 1980 su Estatuto de Autonomía y en Andalucía hubo que organizar un referéndum en febrero de 1980 para decidir si acceder a la autonomía plena mediante la vía rápida y otro en octubre de 1981 para aprobar el proyecto de Estatuto. Las primeras elecciones para elegir el parlamento andaluz fueron en 1982 en las que ganó el PSOE.
Las demás comunidades autónomas celebraron sus primeras elecciones autonómicas en mayo de 1983, excepto Ceuta y Melilla que lo hicieron en 1995.
El Gobierno de UCD (1979-1982) y el Golpe de Estado del 23F
Entre 1979 y 1982, tras la aprobación de la Constitución, se disolvieron las Cortes y se convocaron nuevas elecciones, ganando la UCD. Este periodo presentó estas características:
- Se diseñó el mapa autonómico y municipal.
- Se llevó a cabo una importante labor legislativa (aprobación del Estatuto de Trabajadores y la Ley del Divorcio).
- España ingresó en la OTAN, lo que provocó una gran oposición de la izquierda.
- Tuvo lugar una reforma en la oposición. El PSOE renunció a la ideología marxista y se encaminó hacia la socialdemocracia en la figura de Felipe González.
- El partido gobernante entró en decadencia y la moción de censura incidió negativamente sobre Suárez, esto hizo que sectores de su propio partido se opusieran a él y este dimitió en enero de 1981. La UCD eligió como sucesor a Leopoldo Calvo-Sotelo.
- Se produjo un golpe de Estado (23 de febrero de 1981), protagonizado por Tejero, con la ayuda de Alfonso Armada y con guardias civiles que irrumpieron en el Congreso de los Diputados durante la votación de investidura de Calvo Sotelo como presidente del Gobierno y tomó como rehenes a los parlamentarios.
Los acontecimientos fueron transmitidos por radio y televisión.
El general Jaime Milans del Bosch declaró el estado de guerra y sacó los tanques a la calle en Valencia. El fracaso del golpe reveló la falta de apoyo a los golpistas por parte de los altos mandos militares. La postura contraria del rey frustró la operación y resultó decisiva para afianzar la democracia.