Desde la invasión napoleónica, en España se Vivíó un proceso revolucionario paralelo a la guerra. Había comenzado debido a La ocupación militar francesa de los territorios españoles, tras el Tratado de Fontainebleau (1807) y la llegada de José Bonaparte al poder (Napoleón hizo Abdicar a la familia real, quedándose con el derecho al trono español). La Población se dividíó en afrancesados, favorables a José I; y patriotas o frente Patriótico, que defendían una monarquía borbónica (absolutistas y liberales). Los últimos formaron guerrillas, constituidas por campesinos generalmente, y Estaban organizadas por la Junta Central. Durante la Guerra de la Independencia (1808-1814)
surgieron Juntas locales En las zonas no conquistadas para controlar la situación, formadas por las Antiguas autoridades y por las personas que destacaban en la lucha contra los Franceses; estas se integraron en juntas provinciales que asumieron la Autoridad en nombre de Fernando VII. En Septiembre De 1808 forman la Junta Central Suprema, la cual traspasó sus poderes en 1810 a un Consejo de Regencia de cinco Miembros establecido en Cádiz; la única ciudad no invadida, gracias al Apoyo inglés. Este Consejo convoca Cortes Generales (no estamentales)
. Sin embargo, se reúne una sola asamblea En representación de toda la nacíón, con el reconocimiento de Fernando VII como Soberano legítimo, y con poder constituyente (capaz de elaborar una Constitución).
Las Cortes de Cádiz se reunieron el 24 De Septiembre de 1810, proclamando los principios en los que se basaría la Constitución: soberanía nacional, división de poderes y nueva representación. La mayoría de los diputados eran liberales (aunque no representaban realmente a La opinión mayoritaria del pueblo español), de clases medias urbanas: Comerciantes, funcionarios, y también eclesiásticos y militares; sin Representación de mujeres ni clases populares.La elección de diputados era difícil debido al Dominio francés del país. Estos constituían tres grupos ideológicos: Jovellanistas (ilustrados) partidarios de reformas moderadas sin cambiar el Sistema absolutista, a favor de la soberanía compartida entre rey y Cortes; Liberales partidarios de reformas revolucionarias, soberanía nacional no Compartida con el rey, división de poderes e igualdad jurídica, junto con la Desaparición del Antiguo Régimen para ser sustituido por un sistema liberal;
Y Absolutistas (aristocracia, clero y terratenientes), que no querían perder sus Privilegios y pretendían mantener el Antiguo Régimen y la soberanía exclusiva Del rey.Las Cortes acabaron aprobando una serie de Medidas para terminar con el Antiguo Régimen: abolición de la Inquisición; Supresión de los gremios y de la Mesta; libertad de imprenta, de comercio e Industria; fin de la tortura; y desamortización de los bienes además del fin de La sociedad estamental. La reforma política más relevante fue la Constitución del 19 de Marzo de 1812 (“La Pepa”), la primera de la historia de España. Sus principios básicos, eran: Soberanía nacional, residiendo el poder en la Nacíón; división de poderes, el Legislativo depositado en unas Cortes unicamerales, el ejecutivo en el rey (con Limitaciones para impedir el retorno al absolutismo, aunque sigue conservando Cierto poder ya que dirige las relaciones internacionales y controla el Ejército), y el judicial en los tribunales; sufragio universal, masculino e Indirecto (mayores de 25 años, votan también las provincias americanas), estos Escogían a unos compromisarios que a su vez elegían a los diputados; la Religión católica como única en España; se crea la Milicia Nacional; y se Declara la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley.Por último, también se declaraba la libertad Económica y defensa de la propiedad individual junto a la supresión de los Señoríos jurisdiccionales. La Constitución de 1812 supone el comienzo del constitucionalismo español, con gran influencia en Otros países como Portugal y las nuevas repúblicas americanas como modelo durante El Siglo XIX. Inicia la idea de que el poder emana de la soberanía nacional.Sin embargo, a pesar del éxito de los Liberales en las Cortes, la mayor parte del pueblo español desea la vuelta de Fernando VII y la restauración del Régimenabsolutista, además de La oposición de la Iglesia y la nobleza que se encontraban muy perjudicadas por Las reformas. Por ello, cuando Fernando VII volvíó a España, tanto la Constitución como la mayor parte de la obra legislativa quedaron suprimidas, Dejando a un lado las ideas liberales que traía la nueva legislación, de modo Que apenas tuvieron continuidad. Aún así, las tareas Realizadas por las Cortes se convirtieron en la seña de identidad del Liberalismo español.