Definiciones
- Cartismo: Movimiento obrero que se desarrolló en Inglaterra en la primera mitad del siglo XIX. Debe su nombre a la Carta del Pueblo, documento enviado al Parlamento británico en 1838 donde se recogían algunas de las peticiones de los obreros como el establecimiento del sufragio universal o de un sueldo para los diputados electos con el fin de que también los trabajadores pudieran ejercer cargos públicos.
- Ludismo: Movimiento obrero, desarrollado durante las primeras décadas del siglo XIX, que se caracterizó por la oposición a la introducción de maquinaria moderna en el proceso productivo y que dio lugar a violentas acciones de destrucción de máquinas.
- Segunda Internacional: Para coordinar la acción de los partidos socialistas, en 1889 se creó la Segunda Internacional. Las resoluciones de los diferentes congresos marcaban las directrices a seguir por los partidos socialistas, que reclamaban leyes para la protección de los trabajadores, la jornada laboral de 8 horas y la abolición del trabajo infantil. La Segunda Internacional agrupó a millones de trabajadores, sus debates tuvieron una notable repercusión social.
- Socialismo utópico: Corriente de pensamiento que busca crear sociedades ideales basadas en la igualdad, la justicia y la cooperación, proponiendo comunidades sin clases sociales ni desigualdades económicas, aunque carece de un plan detallado para implementar estas ideas en la sociedad.
- Sindicalismo: Movimiento que defiende los derechos laborales y representa a los trabajadores a través de sindicatos para negociar mejores condiciones de empleo.
- Primera Internacional: También conocida como la Asociación Internacional de Trabajadores, fue una organización fundada en 1864 que buscaba unir a trabajadores de diversos países con el objetivo de promover sus intereses comunes, mejorar las condiciones laborales y luchar por reformas sociales y políticas. Esta asociación jugó un papel importante en la historia del movimiento obrero y sindical, abogando por la solidaridad internacional entre los trabajadores.
Actualidad
Los movimientos obreros del siglo XIX son fundamentales hoy porque sentaron las bases de los derechos laborales, como la jornada de ocho horas y la protección de los trabajadores, inspirando aún la lucha por la equidad y la justicia laboral. Su legado sigue influyendo en las políticas laborales y en la conciencia social sobre los derechos de los trabajadores.
Los movimientos obreros del siglo XIX fueron fundamentales en la historia social y laboral por:
- Patronos y obreros: Inicio de la organización de los trabajadores para exigir mejores condiciones laborales, salarios justos y jornadas de trabajo razonables ya que los trabajadores tenían escasos derechos y a menudo trabajaban en condiciones precarias.
- Sindicalismo: Surgieron sindicatos y asociaciones laborales que dieron voz a los trabajadores, permitiéndoles negociar colectivamente con los empleadores. Esto sentó las bases para la protección de los derechos laborales y la regulación de las condiciones de trabajo.
- Sufragismo: No estaba directamente ligado a los movimientos obreros, muchos trabajadores y sindicatos apoyaron la extensión del sufragio. La lucha por los derechos laborales se entrelazó con la demanda de igualdad política.
Estos movimientos no solo mejoraron las condiciones de trabajo, sino que también sentaron las bases para una mayor igualdad social y política al dar voz y poder a los trabajadores.
Características Marxistas y Anarquistas
Pensamiento Marxista
Los dos pensadores principales fueron Karl Marx y Friedrich Engels, quienes juntos escribieron el Manifiesto Comunista.
Características generales:
- Destruir el orden liberal y el capitalismo.
- Crear una nueva sociedad sin clases sociales y sin propiedad privada.
Vías para cambiar la sociedad:
- Sindicatos: En el último cuarto del siglo XIX, el aumento de trabajadores asalariados dio un gran impulso a los sindicatos y partidos obreros. En buena parte de Europa, se formaron grandes sindicatos centralizados que reunían diferentes ramas de la producción y tenían un elevado número de afiliados. El fortalecimiento de los sindicatos aumentó la capacidad de presión de los trabajadores y las huelgas se convirtieron en instrumentos indispensables.
- Partidos socialistas: Tras el fin de la Primera Internacional, los marxistas defendían la creación de partidos obreros. Tras su legalización, el Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) creció de forma espectacular, impulsando la movilización social para conseguir reformas inmediatas.
Pensamiento Anarquista
Los pensadores más destacados de esta corriente fueron Mijaíl Bakunin, Pierre-Joseph Proudhon y Piotr Kropotkin.
Características generales:
- Crítica de la propiedad privada.
- Defensa de la propiedad colectiva.
- Oposición a la existencia del Estado, por considerarlo un instrumento de opresión, y su sustitución por formas comunales de libre asociación.
- Apoliticismo y rechazo de los partidos políticos.
- Defensa de la espontaneidad de las masas, del individualismo y de la acción directa.
El anarquismo no presenta una doctrina tan homogénea como el marxismo, pero todas las corrientes anarquistas criticaban la sociedad capitalista y proponían un modelo alternativo basado en la ausencia de la autoridad.
Corrientes anarquistas:
- Anarcocomunismo: Tenía una acción más violenta y no tenía una organización definida.
- Anarcosindicalismo: Tenía una organización basada en sindicatos y defendía el apoliticismo.
Entre el marxismo y el anarquismo, se fundó la Asociación Internacional de Trabajadores (AIT) en 1864. Sin embargo, la confrontación entre marxistas y anarquistas llevó al fracaso de la AIT.