Mudéjares y Moriscos
Etimología y Definición
Etimológicamente, mudéjar proviene del árabe «mudayyan», cuyo significado es «aquel a quien se le ha permitido quedarse». Hace referencia a los musulmanes que permanecieron en territorio cristiano tras la conquista, conservando su religión, costumbres y lengua.
Ubicación y Ocupaciones
Los mudéjares se concentraban principalmente en el valle del Ebro, Valencia y Murcia. En su gran mayoría, eran de condición social humilde y se dedicaban a la agricultura (especialmente al regadío), a la artesanía (alfarería) y a la construcción.
Importancia en la Arquitectura
La importancia de los mudéjares se aprecia en la arquitectura, donde crearon una expresión plástica nueva caracterizada por el empleo de materiales económicos como el ladrillo, el yeso, la cerámica y la madera. En Aragón, podemos encontrar ejemplos como la Seo de Zaragoza, las torres mudéjares de Teruel o las de Utebo.
Relaciones con los Cristianos
En un principio, las relaciones de convivencia entre cristianos y musulmanes fueron pacíficas. Sin embargo, con el tiempo, se fueron endureciendo. A finales del siglo XV, la política de los Reyes Católicos se hizo más represiva, especialmente con la actuación del Tribunal de la Inquisición.
Conversión al Cristianismo o Emigración
Se obligó a los mudéjares a convertirse al cristianismo o a emigrar (decretos de expulsión de los mudéjares). Aquellos que prefirieron bautizarse se les llamó moriscos.
Discriminación y Revueltas
Los moriscos fueron siempre mal vistos y objeto de sospechas. Sus pésimas condiciones de vida y la discriminación que sufrían originaron revueltas, como la Rebelión de las Alpujarras.
Expulsión Definitiva
Finalmente, en 1609, durante el reinado de Felipe II, los moriscos fueron expulsados definitivamente. Algunas zonas, como Aragón y Valencia, se vieron muy afectadas. La expulsión de los moriscos supuso un trauma demográfico, pero también económico, ya que se perdía mano de obra que sería difícil de reemplazar.
La Inquisición
Definición y Origen
El Tribunal del Santo Oficio fue un tribunal eclesiástico creado por la Iglesia en el siglo XIII para perseguir los delitos contra la fe cristiana y acabar con las herejías. La Inquisición se introdujo en España mediante los Reyes Católicos en el siglo XV.
Papel Político
La Inquisición jugó un papel político importante, convirtiéndose en un instrumento de control social al servicio del estado monárquico.
Organización
En cuanto a su organización, el Inquisidor General era la máxima autoridad. Como tal, presidía el Consejo de la Suprema y General Inquisición. Dependiente de ella estaban los diferentes tribunales de la Inquisición.
Forma de Actuar
La forma de actuar de la Inquisición era compleja. Cuando llegaba a una ciudad, el primer paso era el edicto de gracia, para que cada uno, por su propia voluntad, confesara sus pecados y evitara un castigo duro. A continuación, se procedía a la detención. La Inquisición utilizó la tortura para arrancar las confesiones.
Castigos y Autos de Fe
Los castigos se comunicaban en una ceremonia pública (auto de fe) y podían consistir en el sambenito, castigos físicos como los azotes, etc.
Procesos Célebres
Algunos procesos célebres fueron los de Galileo Galilei, Antonio de Nebrija, Fray Luis de León y Miguel Servet.
Impacto en la Imagen de España
La Inquisición supuso para España una mala imagen ante la sociedad europea ilustrada, ya que era considerada un atraso cultural, político y social (Leyenda Negra).
Las Encomiendas en América
Colonización y Explotación
Después de la conquista de América, los españoles llevaron a cabo su colonización y explotación en su propio beneficio. Como había pocos españoles, la organización económica y social descansaba sobre la fuerza del trabajo indígena.
Los Indígenas como «Súbditos Libres»
Los indígenas habían sido declarados por la Corona como «súbditos libres», lo que impedía tratarles como esclavos. Este problema se solucionó mediante una institución medieval que se adaptó a tierras americanas: la encomienda.
Definición de Encomienda
Se entendía por encomienda el derecho que daba el Rey a un súbdito español, llamado encomendero, en compensación por los servicios que había prestado a la Corona, para recibir los tributos o impuestos que los indígenas debían entregar a la Corona.
Tributos y Obligaciones
El tributo se pagaba en especie o en servicios personales o trabajo en las tierras o minas de los encomenderos. A cambio, el español debía cuidar de ellos, asegurando su manutención, alojamiento y educación en la fe cristiana. Pero esto acabó transformándose en un sistema de trabajos forzosos.
Repercusiones Negativas
Las repercusiones de las encomiendas fueron negativas para los indígenas, quienes fueron cruelmente tratados. En general, la encomienda implicó el descenso demográfico de los sectores indígenas, por lo que ya en el siglo XVI surgieron voces que cuestionaron el sistema, como la de Fray Bartolomé de las Casas.
Declive y Abolición
Con el paso del tiempo, las encomiendas fueron perdiendo importancia por la pérdida de peso, tanto demográfico como económico, de la población indígena. Se mantuvo con fuerza en las zonas más periféricas, donde el control sobre la población local era esencial para conseguir el poder y la riqueza. La encomienda fue abolida en 1718.