La Habanafue la sexta villa fundada por la Corona Española en la isla de Cuba, llamada San Cristóbal de La Habana
En la Plaza de Armas, que fue en la época colonial el centro de la vida oficial y pública de la ciudad, se alza un monumento llamado El Templete, que conmemora la fundación de la villa en ese lugar 1519.
Antes de la fundación de La Habana hubo 2 asentamientos entre 1514 y 1519
La Habana resurgió en varias ocasiones de los escombros y cenizas a que la reducían de cuando en cuando los piratas y corsarios franceses durante la primera mitad del siglo XVI, hasta que en 1561 la Corona dispone que la ciudad sea el lugar de concentración de las naves españolas procedentes de la colonias americanas antes de partir para la travesía del océano, por lo que se construyen defensas militares a la entrada de la bahía de La Habana y en sitios estratégicos y logran hacer de ella la ciudad mejor defendida del Nuevo Mundo.
La Habana se fortaleció económicamente por su ubicación geográfica, se convirtió en uno de los nodos principales del comercio del Nuevo Mundo. También logró desarrollarse en la industria azucarera y la trata de esclavos, hoy, una de las principales salidas económicas es el turismo en Cuba , siendo que, la industria azucarera se mantiene en pie.
Por el lado de la organización territorial, antes de 1961,La Habana era el nombre oficial solo del municipio central de un área conurbana que abarcaba al menos 6 municipios
Córdoba fue fundada por el sevillano Jerónimo Luis de Cabrera el 6 de julio de 1573, como un pueblo de españoles que sirviera como refugio de los indígenas para así poder desplazarse y comerciar libremente. La ciudad fue declarada capital provisional en dos ocasiones, la primera en 1806 (como capital del Virreinato del Río de la Plata) durante las Invasiones Inglesas y luego en 1955 durante los hechos de la Revolución Libertadora. Es la segunda metrópoli más poblada desde el comienzo de las radicaciones industriales.
Cabrera buscaba dos objetivos. Uno de ellos era disponer de una salida a «La Mar del Nord«, es decir al océano Atlántico, ya que creyó que la laguna de Mar Chiquita era una bahía de este océano; y también intentó fundar una ciudad a orillas del río Paraná. El segundo de los objetivos era la fabulosa Ciudad de los Césares.
Problemas de la época: se encontraban la pobreza, el analfabetismo y la alta mortalidad infantil. También estaban las epidemias de fiebre, gripe, pestes, viruela y tuberculosis. El contagio de estas se facilitaba ya que con la escasez de agua de la época, los baños públicos eran la única posibilidad para higienizarse. Otro problema era la infraestructura de salud, la ciudad contaba con un solo hospital, el San Roque.
Es una importante factoría cultural, receptora de estudiantes universitarios de todo el país y del mundo. Su Universidad (Universidad Nacional de Córdoba), fundada en 1613, es la primera de Argentina y la cuarta más antigua de América. Es considerada una de las más importantes del continente. Cuenta con más de cien mil alumnos.
La ciudad tiene puntos históricos, culturales y turísticos importantes. La Cañada de Córdoba es el encauzamiento parcial de un arroyo que cruza la ciudad de sur a norte. El Arco de Córdoba es un importante símbolo de la cultura ubicado en el ingreso sureste, sobre la Avenida Amadeo Sabattini.
“El Hambre” de misteriosa Bs As. Mujica Laínez
Contexto temporal y espacial: época de la primera fundación de bs as- en América actual territorio de Argentina, provincia de Bs As.
Protagonistas:
Primarios: Baitos: español, hermano de un guardia.
Secundarios: tres españoles: ricos, soberbios.
Hermano de Baitos: guardia de seguridad, cuidaba los colgados.
Españoles colgados: eran comidos por los españoles que morían de hambre.
Conflicto: Baito (español) moria de hambre.
Plan de acción: comer a los hombres que habían sido ahorcados. Su hermano estaba de guardia esa noche asique lo dejaría. Se cruza con tres españoles que él odia.
Resolución: quiere matar a los tres españoles odiados y en una confusión, mata a su hermano.
Organización política y sistema comercial.
La Corona española impuso sobre sus dominios coloniales un orden administrativo fuertemente centralizado y un sistema comercial totalmente controlado por el Estado.
El control político era ejercido por dos instituciones que tenían su sede en la metrópoli. El Consejo de Indias elaboraba las Leyes de Indias que regían en las colonias, y la Casa de Contratación era la encargada de controlar el tráfico comercial entre los puertos españoles peninsulares y americanos.
El territorio americano fue dividido en dos: el Virreinato de Nueva España, con capital en México; y el Virreinato del Perú, con capital en Lima. La autoridad máxima era el virrey, que gobernaba junto a la audiencia que se ocupaba de los asuntos judiciales.
La administración colonial tenía como objetivo mantener la supremacía española sobre los indígenas, garantizar el orden social, recaudar los impuestos y controlar el tráfico comercial. La principal preocupación de la Corona española era asegurar la llegada a las arcas del rey la quinta parte de los metales preciosos extraídos.
Para alcanzar este objetico, la metrópoli estableció el monopolio de puerto único, un sistema comercial férreamente controlado por el Estado. Según este sistema comercial, las salidas y las entradas de mercadería de España hacia América y viceversa se debían realizar por determinados puertos. Durante los siglos XVI y XVII, en España, el único puerto autorizado fue Sevilla; a partir de 1717 fue el puerto de Cádiz. En América los puertos autorizados eran Veracruz, en México; y Portobelo, en Panamá.
Para reforzar el control, se organizo un sistema de flotas y galeones. Los barcos comerciales se reunían en dos salidas anuales (una en enero y otra en agosto) y formaban una flota mercante que navegaba protegida por galeones de guerra. Este sistema de tráfico comercial llamado Carrera de India, permitía a la Corona un mejor control de la recaudación. Los galeones de guerra cumplían la misión de proteger a los barcos, que volvían cargados de metales preciosos, de los ataques piratas.
Este sistema resulto muy lento y provocó desabastecimientos, que afectaron a las colonias.
De piratas y corsarios: a medida que crecían los rumores sobre la riqueza que llegaba a Sevilla, los piratas y corsarios de Europa occidental se hicieron más numerosos. La época de mayor auge fue el período entre 1620 y 1680. Primero fueron los corsarios franceses y, más tarde los piratas ingleses.
La ocupación del actual territorio argentino.
El actual territorio argentino fue poblado por grupos de colonizadores que llegaban de diferentes direcciones. A medida que estos grupos se fueron asentando en la región se originaron corrientes colonizadoras.
CORRIENTE: del Oeste.
ORIGEN: chile.
OBJETIVOS: intentaban crear un cerco de ciudades al otro lado de la cordillera para defender las ciudades chilenas de los indígenas.
ACCION: fundaron San Luis, Mendoza, San Juan y llegaron a la Rioja.
ORIGEN: Alto Perú.
OBJETIVOS: buscaban fuentes de aprovisionamiento para la mina de Potosí.
ACCION: fundaron Bel Barool, Santiago del Estero, San Fernando del valle de Catamarca, San Martin de Tucumán, Córdoba, Salta, La Rioja, San Salvador de Jujuy.
CORRIENTE: Noreste.
ORIGEN: asunción.
OBJETIVOS: buscaban las sierras del Plata y, como ya había sido descubierta se repartieron las tierras.
ACCION: fundaron Santa Fé, Bs As, Corrientes.
CORRIENTE: Este.
ORIGEN: España.
OBJETIVOS: Encontrar un paso entre los océanos Pacífico y Atlántico.
ACCION: llegaron al Rio de la Plata que llamaron mar Blue (solís) y fundaron nuestra señora del Buen Aire.
LA ORGANIZACIÓN DEL DOMINIO COLONIAL EUROPEO.
La encomienda.
Concluida la conquista, los españoles comenzaron a organizar la explotación económica de sus nuevos dominios americanos.
Durante las primeras décadas, los conquistadores se limitaron a extraer las riquezas que se obtenían con mayor facilidad.
Luego, para obtener mayor cantidad de metales preciosos, invirtieron capital y organizaron nuevas producciones. En esta etapa, los intereses y las iniciativas de la Corona se combinaron con las de los particulares.
Frecuentemente los conquistadores actuaban según sus propios criterios y según su conveniencia. La distancia y la lentitud de las comunicaciones entre la metrópoli y las colonias reforzaron la autonomía de los colonizadores y la de las autoridades residentes en América.
La forma de explotación de los aborígenes provocó discusiones entre los funcionarios y entre los pensadores de la época. Los primeros debates giraron sobre si los habitantes originarios eran o no seres humanos, y si podían o no ser reducidos a la esclavitud.
En 1537, el papa Pablo III intervino y estableció que los indígenas no podían ser reducidos a la esclavitud. Al principio el rey Carlos I rechazó el documento; pero finalmente autorizó las encomiendas, que consistían en repartir los poblados indígenas entre un grupo de conquistadores. Los conquistadores eran encomenderos y tenían la obligación de evangelizar y proteger a los aborígenes encomendados.
Las leyes de Indias, hechas por el Consejo de Indias, establecieron límites al poder de los encomenderos sobre los indígenas; sin embargo, la encomienda funcionó con un sistema de explotación laboral. Los encomenderos obligaban a los indígenas repartidos a entregar tributos y a trabajar en las minas o en las plantaciones.
Minas y haciendas.
En 1573, el virrey Toledo, decidió continuar utilizando la mita, el tradicional sistema de trabajo que empleaban los incas.
Según lo dispuesto, los poblados del Alto Perú debían enviar la séptima parte de todos los varones entre 18 y 50 años a trabajar a la mina durante un año. De acuerdo con la organización prevista, los mitayos que llegaban a la mina trabajaban una semana y descansaban dos, en turnos rotativos. Pero en la práctica, los administradores y los mineros españoles abusaron de ese sistema y no respetaron los períodos. Cada mitayo, tenía la obligación de entregar entre 20 y 25 kilos de mineral por día.
Un centro minero generaba un gran movimiento económico, tanto en la propia mina como en sus alrededores. La producción de plata consistía en la extracción del mineral y, luego, en el refinamiento del metal. Este proceso requería inversión de capital.
Hacia 1570, en Potosí vivían aproximadamente 120 mil personas; esta concentración de población requirió la organización de centros de producción agrícola y ganadera para su abastecimiento. Los alimentos, vestimenta, materiales de construcción y animales de carga usados en Potosí provenían de las estancias o haciendas situadas en el Tucumán – nombre con el que se conocía a los territorios desde Córdoba hasta Jujuy.
Los hacendados o estancieros combinaron diferentes sistemas de trabajo en el interior de las unidades productivas. Cuando los propietarios de una hacienda o una estancia eran encomenderos, usaban la fuerza de trabajo de los indígenas encomendados. En otros casos, los terratenientes emplearon a indígenas que no integraban una comunidad repartida en la encomienda, llamados naborías o yanaconas, y también a los españoles pobres.
El sistema de la mita fue usado también en la producción agrícola.
Desde fines del siglo XVI, la creciente mortalidad de la población indígena obligo a los españoles propietarios de estancias a emplear a trabajadores asalariados y esclavos traídos de África
En 1650, la producción de plata del cerro potosí comenzó a decaer y, en consecuencia, el sistema económico se desorganizó. Desde entonces la producción agrícola tuvo cada vez mayor importancia y la propiedad de la tierra se convirtió en la principal fuente de riqueza.