EL régimen político de la Restauración y sus fundamentos sociales. –
INTRODUCCION:
Tras el fallido intento del Sexenio (1868-1874), se restauró la monarquía borbónica y España volvió al liberalismo moderado. El nuevo sistema político, ideado por Cánovas del Castillo, se fundamento en la alternancia en el poder de los grandes partidos, el conservador y el liberal. Se inicia tras el golpe de estado de Arsenio Martínez Campos (29-12-74) en Sagunto y que precipitó a la llegada de Alfonso XII, pero sin duda fue D. Antonio Cánovas el artífice de la Restauración. A pesar del establecimiento del sufragio universal masculino en 1890, el régimen político de la Restauración nunca llegó a ser plenamente democrático y estuvo dominado por una burguesía oligárquica apoyada en un capitalismo de base agraria. En 1898, la pérdida de las últimas colonias españolas, Cuba y Filipinas, sumió a la Restauración en una gran crisis política y moral («el desastre»). –
EL NUEVO SISTEMA POLÍTICO:
Cánovas pretendía vertebrar un nuevo modelo político que superase algunos de los problemas endémicos del liberalismo de los dos primeros tercios del siglo XIX. Para conseguirlo propuso dos objetivos: elaborar unas constitución que vertebrase un sistema político basado en el bipartidismo y pacificar el país poniendo fin a la guerra de Cuba y al conflicto carlista.
La Constitución de 1876 es una prueba de esta búsqueda de consenso, especialmente por el papel que se le otorgaba a la corona. El monarca tenía derecho de veto, nombraba a los ministros del gobierno y conservaba la potestad de convocar, suspender o disolver las Cortes sin contar con el gobierno. La influencia del liberalismo progresista está presente en la declaración de derechos, en la tolerancia religiosa, y en el tema del sufragio sobre el que se pronunciaba. La estabilidad del nuevo régimen se verá favorecida por el fin de las guerras carlista y cubana. Martínez Campos forzó la rendición de los carlistas. En 1878 se pone también fin a la Guerra de los Diez Años (1868-8) en Cuba. La alternancia en el poder dio estabilidad institucional, pero basada en una manipulación del sistema electoral y del propio sistema parlamentario. Los caciques eran personas notables, a menudo ricos propietarios. También podían ser profesionales o funcionarios. Con su influencia, los caciques orientaban la dirección del voto. Los caciques manipularon las elecciones continuamente.
-LOS GOBIERNOS DE 1876 A 1898:
Entre 1876 y 1898 la alternancia en el poder entre los dos partidos dinásticos (el turno) funcionó con regularidad. El desastre del 98 provocará una fuerte erosión en el propio sistema de la Restauración. El primer «turno» será el partido
Conservador. De 881 a18 será el turno del partido Liberal de Sagasta. Pero en 1885 tiene lugar la muerte del rey Alfonso XII. María Cristina de Habsburgo está embarazada. La delicada situación propició la firma del Pacto del Pardo.
María garantiza la continuidad de la monarquía. Se inicia entonces el denominado gobierno largo de Sagasta, entre 1885 y 1890. En la última década del siglo, se mantuvo el turno de partido a pesar de la universalización del sufragio. Cánovas es asesinado. Su desaparición, unido a las disidencias internas dentro de los dos partido dinásticos, inicia la crisis del sistema de turno pacífico.
-LAS FUERZAS POLÍTICAS FUERA DEL SISTEMA:
Uno de los principales problemas políticos de la Restauración es la marginación de la mayoría de las fuerzas políticas más allá de los dos grandes partidos dinásticos. Fueron principalmente los republicanos, carlistas, socialistas y nacionalistas, que nunca conseguirán tener una influencia parlamentaria real.
-LOS REPUBLICANOS:
Después del fracaso de la primera Repúlbica, los republicanos se dividen en diversas tendencias, con un profundo desencanto entre sus seguidores y sufriendo una fuerte represión del nuevo régimen monárquico. Esta situacion dara lugar al nacimiento de varios partidos. Emili Castelar, viejo dirigente republicano intenta que la monarquía asuma alguno de los principios del republicanismo. Ruiz Zorrilla encabeza el Partido Republicano Progresista, el más radical. Utilizaba pronunciamientos militares, como el llevado a cabo por militares cercanos a este partido en 1883, que frcasó totalmente. Los republicanos empezaron a rehacerse electoralmente sobre todo a partir de la aprobación del sufragio universal masculino, en 1890.
-SOCIALISTAS:
Hasta el inicio de la Restauración el movimiento obrero se sentía representado en el terreno político por los republicanos. Tras el Sexenio Revolucionario, los trabajadores, empiezan a organizar sus propias organizaciones políticas.
-CARLISTAS:
Tras su derrota en la Tercera Guerra Carlista, en 1876, se prohibió explícitamente la estancia en España del pretendiente don Carlos de Borbón, y el carlismo entró en una grave crisis. El pretendiente, al que sus seguidores llamaban Carlos VII, se exiliará en Italia después de ser expulsado de Francia y confía la reorganización del partido a Cándido Nocedal. En 1886 Juan Vázquez de Mella llevará a cabo un proceso de renovación para adaptarse a la nueva situación politica. Pero el carlismo se dividirá por el tema religioso. El Partido Carlista, aunque opta preferentemente por la vía política, no olvida su pasado insurreccional.
-DIVISIONES DENTRO DE LOS DOS GRANDES PARTIDOS DINÁSTICOS:
La cuestión católica provocó también divisiones dentro del Partido Conservador. En 1888 se fundó la Unión Católica, liderada por Alejandro Pidal. Un partido conservador y católico. Dentro del Partido Liberal también habra desidencias. En 1881, Segismundo Moret fundó el Partido Democrático-Monárquico. En 1882, el general Serrano creó otro grupo llamado Izquierda Dinástica. Sin embargo, nadie pudo desbancar a Sagasta del liderazgo de los liberales y los nuevos partidos tuvieron escaso apoyo electoral.