TEMA 8 2. La guerra de los 30 años y la pérdida de la hegemonía en Europa.El duque de Lerma firmó la paz con los enemigos de España: la paz de Londres, con Inglaterra en 1604, con Francia en 1610 y la tregua de los doce años con Holanda que supónía el reconocimiento de la independencia de este país. En 1618 España intervino en la guerra de los 30 años junto al emperador alemán. El defensor de los protestantes, elector del palatinado Federico V, derrotado en la batalla de montaña blanca. Los españoles obtuvieron algunos éxitos como la rendición de la ciudad de Breda, pero los protestantes obtuvieron la ayuda del rey de Dinamarca Cristian IV, que fue derrotado por las tropas imperiales del bohemio Wallestein y del flamenco tilly en la batalla de Lutter, obligando a firmar la paz de Lübeck. Posteriormente intervino el rey de Suecia Gustavo Adolfo, con ayuda económica de Francia que invadíó el Imperio y llegó hasta Baviera, donde perdería la vida en la batalla de Lützen. A partir de 1635 la guerra cambió con la intervención directa de Francia gobernada por el primer ministro Luis XIII. Los enfrentamientos favorecieron unas veces a Francia y otras a los Austrias, tuvo gran trascendencia la derrota de los tercios españoles en la batalla de Rocroi en 1643. Los contendientes agotados por la larga guerra, entablaron conversaciones que culminaron en los tratados de Westfalia en 1648. España y Francia continuarían la lucha once años más hasta la paz de los Pirineos en 1659. La batalla más importante es la de las Dunas. En 1668 tuvo que aceptar la independencia definitiva de Portugal.3. Las rebeliones de 1640 en Cataluña y Portugal.Se trata de la mayor crisis política del reinado de Felipe IV. El conde-duque de olivares pretendíó una mayor centralización administrativa, con un fortalecimiento de la monarquía y una mayor participación de los territorios en casos de la monarquía. Se creó la uníón de armas donde todos los territorios deberían colaborar con hombres y dineros de forma proporcional a su riqueza y número de habitantes. Las cortes de Cataluña se negaron a participar. Para forzar la aceptación, olivares abríó un nuevo frente en la frontera catalana con Francia. Fueron caracteres los enfrentamientos en Girona donde los campesinos atacaron a los miembros de los tercios que acogían en su casa. La revuelta se convirtió en una auténtica revolución campesina. La generalitat dirigida por Pau Claris, solicitó la ayuda francesa y proclamó conde de Barcelona al rey Luis XIII. Los franceses cometieron numerosos abusos que provocaron la animosidad de la población catalana. Finalmente, en 1652 las tropas españolas dirigidas por Juan José de Austria en recuperaron el control de Barcelona. En Portugal estalló una revuelta en 1640. La población estaba descontenta por los elevados impuestos y la pérdida de los territorios atlánticos. Fue proclamado el rey de Portugal, el duque de Braganza, de Juan IV. Tras la paz de los Pirineos, Felipe IV pudo ocuparse de Portugal, pero varias derrotas le obligaron a retirarse definitivamente. España los reconoce la independencia hasta 1668. La independencia de Portugal un papel destacado en el apoyo de las potencias enemigas de España. Los portugueses tras su independencia fueron capaces de expulsar a los holandeses de Brasil y otros territorios, recuperando el poder en el atlántico. Se produjeron rebeliones en Nápoles y Sicilia, pudiendo ser sofocadas. En tiempos de Carlos II aceptado la diversidad política de sus territorios.5. La crisis económica y social del siglo XVII.A. La crisis demográfica.- Las grandes epidemias de principios de siglo que afectó a todo el territorio, a mediados de siglo ha afectado en levante y Andalucía y a finales de siglo que se propagó por las mismas regiones.- Las guerras constantes.-La crisis económica, llevó a una reducción de la natalidad y que a un aumento de la emigración a las indias. Gran número de clérigos buscaban en la carrera eclesiástica una forma de ganarse la vida.- La exclusión de los moriscos, fueron por el sentimiento anti-morisco y por el temor a que apoyaran a las incursiones p.M. Distintas, además del deseo de la monarquía de dar una imagen de fuerza para olvidar el fracaso ante Holanda. Con la expulsión culminó el proceso de homogeneización religiosa y cultural iniciado por los reyes católicos.B. El endeudamiento progresivo de la corona.El esfuerzo bélico y la reducción de las remesas, llevaron al incremento del endeudamiento de la monarquía, que se declara en bancarrota en diversas ocasiones. Se trataba del reconocimiento de la imposibilidad de pagar los intereses de la deuda. Ante el fracaso de las medidas de olivares, la solución fue acudir a la venta de títulos nobiliarios, asimismo, se reduciría el Valor real de la moneda de vellón manteniendo su Valor legal y provocando un aumento de los precios. Estas medidas aportaban soluciones a corto plazo.C. La depresión económica.-La caída de la producción agraria, debido a la pérdida de mano de obra.-La pérdida de mercados para nuestra producción lanera, debido a la inseguridad provocada por los largos conflictos.- La crisis de manufacturas textiles, debido al importancia de productos de calidad.-El control extranjero del comercio con las indias, burlando la prohibición de comerciar con aquellos territorios.D. El inicio de la recuperación a finales de siglo Desde 1680 se observa un cambio de tendencia económica, junto a una recuperación demográfica. La devaluación del Valor de las monedas fue muy positiva, frenó la inflación aproximando a su valor real. La recuperación continuaría durante buena parte del Siglo XVIII.E. Las repercusiones sociales de la crisis.Aumentaron las diferencias entre los privilegiados y la masa de población pobre. La aristocracia, seguía constituyendo el grupo más poderoso y con más prestigio social. Se trasladaron a la corte en busca del favor real. La venta de títulos nobiliarios se convierte en un ingreso ordinario de la corona esto lleva a que muchos nobles se endeudan para mantener su vida. El clero, crecido desmesuradamente, se debíó a duras condiciones de vida y al fuerte espíritu religioso que es impregnaba a la sociedad. Los grupos urbanos productivos, artesanos y comerciantes, afectados por la crisis económica. Algunos burgueses con negocios se integraron en la nobleza, comprando títulos nobiliarios y abandonando sus actividades artesanales y comerciales. Debido a la crisis aumentó el número de mendigos, pícaros y criados. Los campesinos, principales víctimas de la crisis, aumentó o el número de jornaleros y arrendatarios progresando en latifundio debido a la despoblación. La mala situación del campesinado llevara al resurgimiento del bandolerismo.