El Regeneracionismo y la Crisis de la Restauración (1898-1923)
El Impacto de la Crisis de 1898
La crisis de 1898 tuvo serias repercusiones psicológicas en la sociedad española, que protagoniza un nuevo impulso: el Regeneracionismo. Un planteamiento con propuestas diferentes. El reinado de Alfonso XIII se convirtió en el marco histórico en el que se intentó afrontar la avalancha de problemas derivados de la ruptura entre la España oficial y la real. Por lo que se comienza un abanico de reformas, debía superarse el atraso económico, resolver el conflicto colonial marroquí (Conferencia de Algeciras, 1906) e intentar que el ejército no volviera a su antiguo protagonismo. El primer intento vendrá “desde arriba” con el revisionismo político. Surgen enfrentamientos internos en los partidos del turno para conseguir su liderazgo (Silvela en los conservadores, Montero Ríos en los liberales) y por ello la inestabilidad caracterizará 1902-1907; conocida como la etapa de las “crisis orientales” (10 gobiernos).
El Intento Regenerador de Antonio Maura (1907-1909)
En 1907 con la llegada al gobierno de Antonio Maura se inicia el intento regenerador conservador. Tomó medidas como la creación del Instituto Nacional de Previsión para beneficiar a las clases más desfavorecidas. Se enfrentó al caciquismo (Reforma electoral de 1907) y trató de mejorar la economía (Ley de Protección de la Industria Nacional).
Mas todo este proyecto regeneracionista se truncó a partir de los sucesos de la Semana Trágica de Barcelona en 1909, causado por el desastre del Barranco del Lobo (mueren más de 1200 soldados). Maura decidió mandar reservistas de Madrid y Barcelona (clases humildes), y los disturbios comenzaron en el puerto de Barcelona con el embarque de los soldados. Apareció además un creciente sentimiento de republicanismo que se concretó en una huelga general. El conflicto se radicalizó y Maura mandó al ejército para sofocarlo, lo que provocó oleada de protestas (“¡Maura no!”) y la formación de una coalición política. Además se crea la Conjunción republicano-socialista y la CNT (1910).
El Proyecto Liberal de Canalejas (1910-1912)
Tras un breve gobierno de Moret, con Canalejas hubo en 1910 un nuevo intento regenerador pero desde perspectiva liberal. Se redactó la Ley del Candado, Ley de Mancomunidades, Ley de Reclutamiento obligatorio. Ganándose la enemistad de todos los sectores, fue asesinado por Pardinas en 1912. Lo que supone el fin del proyecto regeneracionista.
La Crisis de 1917 y la Descomposición del Sistema
El monarca reclamó a Eduardo Dato que abre en 1913 un nuevo periodo. Al estallar la Guerra Mundial, la decisión de neutralidad fue la más beneficiosa y favoreció la exportación (aunque aumentó el empobrecimiento). En 1917 surgió una nueva crisis que va a tener tres manifestaciones:
- Militar (enero). Descontentos con la inflación y el favoritismo, para presionar al gobierno los militares crearon las **Juntas de Defensa**. Que suponían una muestra de insubordinación, pero que finalmente se legalizó. Todo este movimiento se tradujo en a nueva **Ley del Ejército de 1918**: el Estado perdía el control sobre los militares.
- Político (julio). Cambó convocó primero a los parlamentarios catalanes a una Asamblea en Barcelona y el 19 de julio a diputados y senadores de grupos marginados por el sistema turnista, es decir, a los catalanes se unieron republicanos y socialistas. Disolviéndose finalmente por:
- Negativa de colaborar por las Juntas Militares de Defensa.
- Divergencias y desconfianzas de los participantes.
- Obrero (agosto). La inflación, la miseria, el desempleo…provocaron la intensificación de los conflictos sociales y agitación obrera. El descontento fue canalizado por la CNT y la UGT, quienes firmaron una alianza en 1916 que desembocó en la huelga general indefinida en 1917. El ejército tuvo que acabar con ella. Se disolvió la Asamblea: los nacionalistas prefirieron unirse al sistema antes que reformarlo.
Todos estos acontecimientos indicaban que el sistema político de la Restauración era incapaz de regenerarse desde dentro. Estaba en plena descomposición. Desde 1917 a 1923 se van a suceder 23 crisis de gobierno, apareciendo gobiernos de concentración como el de Maura en 1918. Además, el final de la guerra trajo un agravamiento de la crisis social por descenso del crecimiento económico (Trienio Bolchevique en Andalucía, 1918-1920; reactivación del terrorismo, etc.).
El Desastre de Annual y el Golpe de Estado de Primo de Rivera (1921-1923)
Por si no fuera suficiente se vive además en esta época el desastre militar de Annual (1921). El general Fernández Silvestre inició en 1921 una política de penetración rápida sin cubrir la retaguardia, quedando a merced de las tropas de Abd-el-Krim. Siendo los españoles víctimas de una masacre.
Para determinar la responsabilidad de la masacre se inició el Expediente Picasso, siendo procesados por negligencia 39 oficiales (entre ellos Berenguer). Cuando el informe debía ser debatido en el congreso, el general Primo de Rivera da un golpe de Estado el 13 de septiembre de 1923, que da comienzo a su dictadura. De nuevo hay un general en el poder.