En el año 711 un ejército bajo el mando de Tariq, formado básicamente por bereberes procedentes del norte de África, cruzó el estrecho de Gibraltar, vencíó al último rey visigodo en la batalla de Guadalete e inició la conquista de la Península. Hacia el 718 prácticamente todo el territorio había sido ocupado por los musulmanes debido a que buena parte de la nobleza visigoda pactó la sumisión y el pago de tributos a cambio de la conservación de sus tierras.
Entre el 714 y el 756, Al-Ándalus fue un Emirato dependiente de Damasco, gobernado por un valí, ya que este territorio era una provincia. El inicio de una época de estabilidad comenzó con la llegada a la Península de Abderramán I, de la dinastía Omeya, que convirtió el territorio en un Emirato independiente.
Abderraman III que estaba al frente del Emirato cordobés desde el año 912, decidíó en el 929 adoptar el título de Califa, con lo que se independizaba religiosamente de Bagdad. Dio así comienzo en la historia de Al-Ándalus la etapa conocida como Califato de Córdoba (929-1031), siendo esta su capital durante tres siglo.El primer califa fue Abderramán IIIque gobierna desde el 912/929 – 961. El deseo de frenar el avance de los Fatimí por el norte de África le llevó a proclamarse “príncipe de los creyentes”, es decir, Califa. Éste controló a los cristianos del norte peninsular, que intentaban avanzar hacia el sur. Le sucedíó su hijo al-Hakam II en 962,que había recibido una exquisita educación. Con él, el califato alcanzó su periodo de máximo esplendor, basado en su poderío económico y militar, lo que le permitíó llevar a cabo una política de grandes obras públicas, como la ampliación de la Mezquita o la finalización del palacio de Medina Azahara (comenzada a construir por su abuelo). Además, tuvo un enorme desarrollo cultural, cuyo máximo logro fue la creación de una gran biblioteca de más de cuatrocientos mil volúMenes. Murió en el 976 siendo sucedido por su hijo Hisham II, el cual vio como su poder político fue ocupado por Almanzor. Este fue el constructor de una auténtica dictadura militar. Su muerte en el año 1002 tras la Batalla de Calatañazor, marca el comienzo del declive del Califato de Córdoba. Tras la muerte de sus hijos, se inicia un periodo de caos permanente, hasta que en el año 1031, los notables de Córdoba, en un hecho sin precedentes en toda la Historia del Islam, decidieron la abolición del Califato, debido a la inacabable guerra civil. Al-Ándalus se convirtió en un mosaico de núcleos políticos independientes, denominados Reinos de Taifas.Los Reinos de Taifas son un conjunto de treinta pequeños estados musulmanes que se identificaban con el origen étnico de sus gobernantes: los Beréberes se hicieron con el control de la costa meridional, los Eslavos se apoderaron de algunas ciudades de la costa oriental, como Almería, Valencia o Tortosa, y finalmente, en el interior de Al-Ándalus, surgieron reinos dirigidos por poderosas familias de origen árabe y muladí. Las marcas fronterizas, situadas en torno a Zaragoza, Toledo y Badajoz se convirtieron también en reinos independientes.Estos reinos gozaron de una gran riqueza y cultura, pero carecieron de la organización militar suficiente como para poder consolidarse.Durante el reinado de al-Qadir en la Taifa de Toledo, pactó con el rey castellano Alfonso VI para lograr hacerse con el control de la ciudad: Castilla ocuparía Toledo y al-Qadir sería nombrado rey de Valencia. Alfonso VI finalmente entra en Toledo en 1085, ciudad que nunca más volvíó a manos musulmanas.
Ante la alarmante situación, los reyes de Sevilla, Badajoz y Granada, piden ayuda a los Almorávides norteafricanos, que derrotaron a los castellanos en la Batalla de Zalaca en el 1086. Dos años después los almorávides regresan y aprovechando la debilidad de Al-Ándalus, incorporarán a su Imperio los reinos de Taifas.
El hundimiento del poder almorávide (1145) propició la aparición de los llamados Segundos Reinos de Taifas, con una existencia muy efímera porque Al-Ándalus fue de nuevo unificada bajo el poder de los Almohades, que derrotaron a Alfonso VIII en la Batalla de Alarcos (1195).Años después, dirigíó una gran campaña organizada con todos los aires de una cruzada, y en la que participaron todos los reinos cristianos peninsulares, excepto el rey Alfonso IX de León y el rey de Portugal, con quienes estaba enfrentado el rey de Castilla. Esto concluyó en la Batalla de las Navas de Tolosa (1212) donde fueron derrotados los almohades. Así aparecieron los Terceros Reinos de Taifas, aunque el único que se mantuvo durante dos siglos y medio, hasta la entrada de losReyes Católicos en 1492 fue el reino nazarí de Granada.
la sociedadandalusí presentaba una notable pluralidad étnica y religiosa. La mayoría islámica se hallaba dividida en diferentes etnias que, a pesar de ser iguales ante la ley, ocupaban distintas posiciones sociales. El grupo privilegiado estaba formado por los baladíes seguidos de los bereberes y los muladíes También hay que destacar los mozárabes (hispanos que habían conservado la religión cristiana) y los judíos.
La España musulmana tuvo un elevado desarrollo cultural y científico orientado hacia las ciencias prácticas (Medicina, Astronomía, Matemáticas…), pero también cultivó la Historia, la Filosofía, la Música y la Literatura. La lengua árabe también dejó su impronta en la lengua castellana, que contiene un gran número de palabras de este origen. En el arte, y sobre todo en la arquitectura, es donde el Islam dejó su huella más carácterística: la Mezquita de Córdoba y la Alhambra de Granada son sus dos más relevantes ejemplos.