Revolución Americana: Causas y Desarrollo
El Reino Unido tenía trece colonias en la costa oriental de Norteamérica. Tras las pérdidas de Gran Bretaña en la Guerra de los Siete Años, se intentó recuperar los costes de la guerra mediante la creación de nuevos impuestos en sus colonias americanas. Estas se negaron a pagar, argumentando que, al no tener representación en el Parlamento, no estaban obligados a contribuir. Aunque varios impuestos fueron suprimidos, se mantuvo el impuesto sobre el té. La venta del té a las Indias Orientales perjudicó a los comerciantes de las colonias, lo que desembocó en el Motín del Té (Boston Tea Party) en diciembre de 1773. En este evento, un grupo de jóvenes lanzó al mar los cargamentos de té que la compañía tenía en el puerto de Boston. La respuesta del gobierno británico fue el cierre del puerto y la imposición de una elevada multa a los habitantes de Massachusetts.
En septiembre de 1773, las colonias se reunieron en Filadelfia para elaborar una lista de reformas. Al año siguiente, comenzaron los primeros enfrentamientos.
Fases de la Revolución Americana
- Primera fase (1775-1777): Los rebeldes, dirigidos por George Washington, se enfrentaron a los británicos con una táctica de guerrillas. Se destaca la victoria de las colonias en Saratoga (1777). Francia decidió apoyar a las colonias, al igual que España.
- Segunda fase (1778-1782): Las tropas británicas fueron derrotadas en Yorktown. La paz se restableció con el Tratado de Versalles (1783), por el cual el Reino Unido reconocía la independencia de los Estados Unidos de América.
Constitución de los Estados Unidos
En 1787, cincuenta delegados reunidos en Filadelfia prepararon el texto de la nueva Constitución, que entró en vigor en 1789. Esta establecía un sistema con tres poderes:
- Poder legislativo: Residía en el Congreso, compuesto por dos cámaras: el Senado (dos miembros por estado) y la Cámara de Representantes (número de representantes proporcional a la población). Aprobaba los impuestos y presupuestos, tenía la iniciativa de las leyes y declaraba la guerra y la paz.
- Poder ejecutivo: Ejercido por un presidente, elegido por sufragio universal masculino. Este nombraba a los miembros del gobierno, tenía el mando de los ejércitos, podía promulgar leyes y ejercer el derecho de veto. El primer presidente de EE. UU. fue George Washington.
- Poder judicial: Era independiente del poder político. A su cabeza estaba el Tribunal Supremo, formado por seis miembros nombrados por el presidente, cuya tarea era velar por la constitucionalidad de las leyes.
Orígenes de la Revolución Francesa
Problemas de la Hacienda Real
Francia atravesaba una profunda crisis económica que afectaba gravemente a la Hacienda Real, limitando las posibilidades de actuación del gobierno de Luis XVI. Algunos ministros como Turgot, Calonne y Loménie de Brienne plantearon reformas basadas en las ideas ilustradas. La intervención de Francia en la Guerra de Independencia Americana agravó la crisis de la Hacienda Real y sus deudas. La única solución era obligar a los privilegiados a pagar impuestos.
Una Asamblea de Notables reunida en 1787 rechazó el pago de impuestos de los privilegiados, planteado por el ministro de Hacienda. La nobleza exigió la reunión de los Estados Generales, ya que todo nuevo impuesto debía ser aprobado por esta institución. Los Estados Generales no habían sido convocados desde 1614.
La Convocatoria de los Estados Generales
El monarca aceptó convocar los Estados Generales para el 5 de mayo de 1789. En ese momento, Francia sufría una grave crisis de subsistencia debido a la elevación de los precios de los alimentos por su escasez a causa de inundaciones y sequías. Esta situación generó un aumento del desempleo.
Antes de la reunión de los Estados Generales, se elaboraron unos cuadernos de quejas en los que cada estamento apuntaba sus peticiones. Los cuadernos de la nobleza y el clero defendían los privilegios tradicionales, mientras que los del Tercer Estado reclamaban libertad y la supresión del sistema feudal.
En febrero de 1789, el enfrentamiento del Tercer Estado con los privilegiados alcanzó su punto álgido con la publicación del folleto ¿Qué es el Tercer Estado?, obra del Abate Sieyès, donde se manifestaba la intención de hacerse con los destinos de la nación al margen de los privilegiados. Parte de la nobleza y el clero apoyaban al Tercer Estado, ya que consideraban que solo con la aplicación de reformas profundas de carácter ilustrado se podía resolver la situación. No debemos olvidar la gran difusión de las ideas ilustradas en Francia y la influencia de la independencia de EE. UU.
Revolución Francesa (1789-1792)
La Asamblea Nacional (1789-1792)
El 5 de mayo de 1789 se reunieron en Versalles los Estados Generales. Los privilegiados contaban con dos votos (nobleza y clero) y el Tercer Estado, aunque representaba a la mayoría de los franceses, solo tenía un voto. El Tercer Estado había pedido en los cuadernos de quejas que se votara por cabeza, así ellos tendrían la mayoría. El rey aceptó doblar el número de diputados del Tercer Estado, pero no el voto por cabeza.
De la Revuelta Institucional a la Revuelta Popular
Los privilegiados se negaron a reunirse conjuntamente con el Tercer Estado. Como respuesta, el Tercer Estado se autoproclamó Asamblea Nacional. Esto era un acto revolucionario, por lo que el rey anuló todas las decisiones tomadas por el Tercer Estado y ordenó cerrar su sala de reuniones. Los diputados se reunieron en la Sala del Juego de Pelota. La Asamblea pasó a llamarse Asamblea Nacional Constituyente.
La respuesta popular al rey fue el asalto a la prisión de la Bastilla de París (lugar donde se encerraban a presos políticos) el 14 de julio de 1789. La multitud se dirigió allí para liberar a los presos, pero se negaron a abrirles las puertas y los soldados empezaron a disparar. Los revolucionarios se lanzaron al ataque y, finalmente, los defensores se rindieron. Este hecho se convirtió en el símbolo de la Revolución y, por eso, ese día es ahora la fiesta nacional francesa.
Se formó una Guardia Nacional para establecer el orden, a la que el rey puso a Necker en su cargo y aceptó las decisiones de la Asamblea Constituyente. En el verano de 1789 tuvo lugar El Gran Miedo, una revuelta popular desarrollada en la Francia rural en la cual se asaltaron castillos, se quemaron escrituras de propiedad y se exigió la abolición del sistema feudal.