REINADO ISABEL II:

Nos situamos en 1833, con  la muerte de Fernando VII se produce un enfrentamiento entre los partidarios de Carlos Mª Isidro, hermano del rey difunto, favorables al absolutismo; y los partidarios a Isabel, hija legítima y heredera de Fernando VII. Todo ello por la minoría de edad de Isabel , en la cual esta como regente Mª Cristina. Esto dió lugar a la Primera Guerra Carlista. Paralelamente a esta guerra, la revolución liberal se aceleró, comenzando por los primeros gobiernos de transición. Fernando VII en su testamento estableció que se crearan estos gobiernos para ayudar a Mª Cristina en la regencia. Cea Bermúdez fue el primero en presidir dicho gobierno,pero su inmovilismo chocó con los deseos de la sociedad, y Mª Cristina escogió para seguir con la presidencia a Martínez de la Rosa, que propuso la promulgación de un Estatuto Real, aunque las reformas fueron insuficientes. Mª Cristina le quitó la presidencia para dársela a Mendizábal, que inició rápidamente las reformas del Estatuto Real, tomando a la vez medidas financieras para luchar contra el carlismo. Con la desamortización de Mendizábal, todo esto se torció y la sociedad pedía restablecer la Constitución de 1812. Fue entonces cuando Mª Cristina nombra a Calatrava presidente del gobierno. Se convocaron unas Cortes extraordinarias que redactaron la Constitución de 1837./Con la dimisión de Mª cristina, Espartero asumió la regencia y disolvió las Juntas Revolucionarias para gobernar con un marcado autoritario. Espartero tuvo que abandonar la regencia y las Cortes adelantaron la mayoría de edad para que Isabel II fuera proclamada reina a los 13 años./Con Isabel II en el trono, llegamos a la Década Moderada. Suben al gobierno los moderados presididos por Narváez. No consiguieron dar estabilidad política al estado, además, actuaron arbitraria y excluyentemente manipulando las elecciones y reduciendo la importancia del poder legislativo sin olvidar la creación de la Constitución de 1845./En 1846 se inicia la Segunda Guerra Carlista, que más que una guerra fue una revolución en la Década Moderada, como oposición al liberalismo. Aprovechando el destronamiento de isabel
II en 1872, tuvo lugar la Tercera Guerra Carlista, que acaba con la definitiva derrota del carlismo.

CORTES DE CADIZ:

Era verano de 1808, las Juntas locales y provinciales que dirigían la resistencia, enviaron representantes para formar una Junta Suprema Central. La Junta reconoció a Fernando VII como legítimo rey y asumió su autoridad hasta su retorno. Pero ante el avance francés, tuvieron que huir a Sevilla, y de allí a Cádiz en 1810, donde residieron el asedio francés./Debido a las dificultades, la Junta Central se disolvió y nombró una Regencia que convocó a las Cortes e inició un proceso electoral. Muchos diputados de diferentes provincias no pudieron asistir, por lo que apenas votaron los que residían cerca de Cádiz. Al abrirse las Cortes, se formó una cámara única y se aprobó la soberanía nacional./En su composición destacó la fuerte presencia del clero, algunos miembros de la nobleza y las clases medias urbanas. No había partidos políticos, aunque pronto se formaron tres grupos, compuestos por absolutistas, jovellanistas y liberales./Su obra política tenía un claro objetivo: desmantelar el Antiguo Régimen e instaurar un estado liberal. Podemos destacar la Constitución de 1812, texto que analizamos, el Decreto de la abolición de los señoríos jurisdiccionales, por los que suprimieron los privilegios feudales, la desamortización de los bienes de manos muertas y la supresión del Santo Oficio de la Inquisición.

TRIENIO LIBERAL: Con ese texto, Rafael de Riego, al frente de una compañía de soldados, se sublevó y proclamó en Andalucía la Constitución de 1812. La pasividad del ejército, la acción de los liberales y la neutralidad de los campesinos, obligaron a Fernando VII a aceptar la constitución. Inmediatamente se proclamó un gobierno y se convocaron elecciones a las Cortes./Los resultados de las votaciones dieron como ganadores a los liberales, que iniciaron una gran obra legislativa. Restauraron algunas obras de Cádiz; establecieron la disminución del diezmo; hicieron reformas en el sistema fiscal, el código penal y el ejército; impulsaron el comercio; iniciaron la modernización política  y administrativa del país; se formaron ayuntamientos y diputaciones; y se reconstruyó la Milicia Nacional con el fin  de mantener todas estas medidas./Todas estas reformas suscitaron la oposición de la monarquía. Fernando VII aceptó las condiciones forzadamente y paralizó todas las leyes que pudo. Además conspiraba contra el gobierno para recuperar su poder con la ayuda de los países absolutistas./Por otro lado, los campesinos estaban en desacuerdo con la medida de suprimir los señoríos jurisdiccionales y entregárselos como propiedad privada a los señores. Además, con los nuevos impuestos ler eran más difícil salir adelante. Por ello, los campesinos más vulnerables se unieron a la protesta antiliberal./Por su parte, la nobleza y la Iglesia impulsaron la revuelta contra los gobernantes. En 1822 se alzaron las partidas absolutistas. Llegaron a contar con 280000 voluntarios y consiguieron una regencia en Seo de Urgel en 1823./También existían conflictos entre los liberales ya que existían dos tendencias: moderados (partidarios de reformas limitadas que no perjudicasen a las clases altas) y exaltados (partidarios de reformas radicales que favoreciesen a las clases medias populares.