La Rusia Zarista y la Semilla de la Revolución
El Imperio Ruso a Principios del Siglo XX
El Imperio Ruso, con una población de aproximadamente 150 millones de habitantes, se caracterizaba por una distribución demográfica irregular y una gran diversidad de nacionalidades. El nivel de vida era bajo, con una pobreza generalizada. El sistema político era una monarquía autocrática, donde el zar ejercía el poder por derecho divino, respaldado por una aristocracia feudal.
Oposición al Zarismo y el Surgimiento del POSDR
En Rusia, surgió una oposición política al zarismo, influenciada por la tradición liberal europea. A finales del siglo XIX, se fundó el Partido Obrero Socialdemócrata Ruso (POSDR), de ideología marxista. Este partido sostenía que la clase obrera debía liderar una revolución para eliminar las injusticias y desigualdades. En 1903, el POSDR se dividió en dos facciones:
- Bolcheviques: Liderados por Lenin, defendían la conquista del poder por una minoría.
- Mencheviques: Representaban una tendencia más moderada.
El Imperio Ruso en 1914 abarcaba un vasto territorio, equivalente a una sexta parte de la superficie terrestre.
De la Revolución de 1905 a la Primera Guerra Mundial
La Revolución de 1905 y las Reformas del Zar
Las movilizaciones populares, huelgas, revueltas campesinas y sublevaciones militares crearon una situación prerrevolucionaria. Para coordinar estas acciones, se formó en San Petersburgo (la capital del Imperio) un Soviet, un consejo de obreros, campesinos y soldados. Aunque los revolucionarios no lograron tomar el poder en 1905, presionaron al zar para implementar reformas:
- Creación de la Duma (un parlamento).
- Inicio de una reforma agraria con reparto de tierras.
- Establecimiento de libertades individuales limitadas.
El Impacto de la Primera Guerra Mundial
La Primera Guerra Mundial agravó la situación económica y social en Rusia, empeorando las condiciones de vida. La desmoralización del ejército y del pueblo aumentó considerablemente.
La Revolución de Febrero de 1917: «Paz, Pan y Tierra»
El Detonante: El Racionamiento
La escasez económica y la desmoralización generalizada, junto con la imposición de cartillas de racionamiento por parte del Gobierno, desencadenaron un nuevo brote revolucionario. En febrero de 1917, obreros en huelga y mujeres lideraron manifestaciones populares bajo el lema bolchevique: «Paz, pan y tierra». Las fuerzas del orden y la Duma se unieron a los revolucionarios.
Los Soviets y las «Tesis de Abril» de Lenin
En los meses siguientes, obreros, campesinos y soldados tomaron el poder local, formando Soviets. En la conferencia de los Soviets, Lenin presentó las «Tesis de Abril», donde rechazaba la colaboración con el Gobierno provisional y defendía una nueva fase de la revolución para tomar el poder.
La Revolución de Octubre de 1917: «Todo el Poder para los Soviets»
La Insurrección Bolchevique
El Gobierno provisional intentó impulsar la participación en la guerra, lo que incrementó la tensión social. Lenin decidió pasar a la insurrección. Los bolcheviques, desde la sede del Soviet de Petrogrado, organizaron la revolución. En la noche del 24 al 25 de octubre (según el calendario ruso), las tropas revolucionarias ocuparon puntos estratégicos de la ciudad, tomaron el Palacio de Invierno y destituyeron al Gobierno.
El Primer Gobierno Revolucionario: El Sovnarkom
Se estableció el Soviet de Comisarios del Pueblo (Sovnarkom), presidido por Lenin, y se promulgaron los primeros decretos:
- Decreto de la Paz: Para poner fin a la participación en la guerra.
- Decreto de la Tierra: Legalizaba la apropiación campesina de tierras de la Corona, la Iglesia y los terratenientes.
- Decretos Económicos: Nacionalización de bancos y control obrero de las empresas.
- Decreto del Derecho de Autodeterminación.
- Decreto de la Tcheka: Creación de la policía política.
- Decretos de Emancipación de las Mujeres: Establecían la igualdad entre hombres y mujeres.
Se convocaron elecciones por sufragio universal para elegir una Asamblea Constituyente. En enero de 1918, el Partido Socialista Revolucionario obtuvo la mayoría. Los bolcheviques disolvieron la Asamblea Constituyente por la fuerza, argumentando que la verdadera representación del pueblo residía en el Congreso de los Soviets. El zar y su familia fueron ejecutados en julio de 1918. En marzo de 1918, Lenin firmó el Tratado de Brest-Litovsk con Alemania, poniendo fin a la guerra a cambio de importantes pérdidas territoriales.
La Guerra Civil Rusa y el Nacimiento de la URSS
Guerra Civil (1918-1923) e Intervención Extranjera
La situación económica de Rusia era caótica. La oposición de algunos sectores políticos y la amenaza que representaba la Revolución de Octubre para las potencias extranjeras (que temían la expansión del comunismo) llevaron a una intervención militar en Rusia. En la guerra civil se enfrentaron:
- Ejércitos Blancos: Contrarrevolucionarios.
- Ejército Rojo: Gobierno revolucionario.
Las tropas soviéticas se impusieron en 1921.
El Estado Soviético y la NEP
En 1922, nació la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS). En el plano económico, se implementó el «comunismo de guerra», con la militarización de la industria. Este modelo, aunque permitió abastecer a las tropas, fue desastroso para la población, generando hambrunas generalizadas. El Gobierno consolidó una dictadura de partido único, con el control bolchevique del Congreso de los Soviets y la persecución de disidentes por parte de la Checa.
La Nueva Política Económica (NEP), implementada entre 1921 y 1928, permitió una notable recuperación económica y un aumento considerable de la producción agrícola. En enero de 1924, murió Lenin, dando paso a la lucha por el poder entre Trotski y Stalin.
El Crack del 29 y la Gran Depresión
El Abrupto Final de la Prosperidad: La Burbuja Financiera
El auge de la economía estadounidense se basó en un crecimiento financiero desmesurado. Los beneficios se invirtieron en operaciones especulativas en la Bolsa, con la esperanza de enriquecerse rápidamente comprando y revendiendo acciones. Se concedieron créditos sin suficientes garantías. La Bolsa de Valores de Nueva York estaba sobrevalorada, alimentando una burbuja financiera.
El Crash de la Bolsa de Nueva York y la Gran Depresión
El 24 y 29 de octubre de 1929 («Jueves Negro» y «Martes Negro»), la cotización de las acciones se desplomó, generando pánico en Estados Unidos. Se produjo una venta masiva de acciones, lo que provocó el crash de la Bolsa de Nueva York. Las empresas perdieron su valor, los ahorradores vieron desaparecer su dinero y muchos bancos quebraron. La producción industrial disminuyó drásticamente. La crisis económica se extendió rápidamente a nivel mundial, dando lugar a la Gran Depresión.
Consecuencias de la Crisis: Desempleo y Pobreza
La principal consecuencia de la crisis fue el crecimiento del desempleo: millones de personas perdieron sus trabajos y sufrieron la pobreza.
Medidas para Salir de la Gran Depresión
El «New Deal» de Roosevelt en Estados Unidos
La Gran Depresión afectó especialmente a los países industrializados, siendo Gran Bretaña, Austria y Alemania los más perjudicados. Cada país adoptó diferentes soluciones, basadas en el nacionalismo económico o en la intervención estatal:
- Estados Unidos: El presidente Roosevelt propuso el New Deal, un plan para relanzar la economía que incluía la intervención del Estado, el fomento de obras públicas, subvenciones y una mayor asistencia social.
- Gran Bretaña: Se devaluó la moneda nacional para favorecer las exportaciones. Se implementó el proteccionismo, estableciendo aranceles aduaneros para las importaciones con el objetivo de proteger la industria nacional.