Eran el Ejército, base del régimen y el más leal al dictador, con numerosa presencia en las Cortes y Consejo de Ministros; la Falange, que perdíó
protagonismo tras la derrota fascista en la Segunda Guerra Mundial, ; y la Iglesia como legitimadora del régimen, presentes en tareas del Estado a través del Opus Dei y también tuvo el control sobre la educación. Por último, la monárquicos aspiraban al restablecimiento de la monarquía de don Juan de Borbón y los apoyos sociales como la oligarquía y las capas medias.La evolución política del régimen (1939-1959) estuvo marcada por la política internacional, que pasó del
aislamiento al reconocimiento exterior.
Comenzó con los Gobiernos azules (1939-1945), en los que Serrano Suñer diseñó un Estado fascista. Con el inicio de la II Guerra Mundial España se declaró no beligerante, celebrando encuentros con Hitler en Hendaya y con Mussolini en Bordighera, cooperando con la División Azul; volviendo a la neutralidad en 1943. En la etapa del Gobierno autárquico (1945-1951), tenían que gestionar la autarquía económica y el aislamiento internacional, ya que desde 1945 España quedó aislada y la ONU condenó el régimen en 1946, iniciándose un bloqueo internacional. Se produjeron manifestaciones como la de la Plaza de Oriente, donde surgieron eslóganes como “No tenemos ONU, tenemos dos”. En el Gobierno “bisagra” (1951-1957) destaca Carrero Blanco como ministro de Presidencia. En el exterior con el desarrollo de la Guerra Fría, el “antisovietismo” de Franco desembocó en acuerdos con Estados Unidos (1953) que permitíó la instalación de cuatro bases militares norteamericanas para la defensa bilateral y la ayuda económica. Inició el reconocimiento internacional del régimen como el Concordato con el Vaticano (1953) y el ingreso en la ONU (1955) y en la UNESCO. En ese sentido, se aprueba la Ley de Principios del Movimientos Nacional de 1958. Comenzó el crecimiento económico unido al fin del aislamiento, pero en 1957 el Estado estaba al borde de la bancarrota, Franco formó un Gobierno de tecnócratas, que pondría en marcha el Plan de Estabilización (1959). Con la crisis de 1956 se produce un proceso inflacionario y un colapso del sistema de intervención estatal . Como consecuencia, Franco recurríó tecnócratas vinculados al Opus Dei, entre los que destacaron Navarro Rubio y Ullastres quienes elaboraron el Plan de Estabilización Económica en 1959, por la que el dictador supedita su política a la economía, dando lugar así al desarrollismo. Las medidas más destacadas fueron la reducción de la intervención estatal, la devaluación de la peseta, favoreciendo la inversión extranjera, y la
apertura a los mercados exteriores. Posteriormente, se pusieron en marcha unos Planes de Desarrollo, promulgándose dos planes (1964-1967, 1968-1971) y uno inconcluso debido a la crisis de 1973. Se creó una Comisaría del Plan de Desarrollo para controlar su funcionamiento, presidida por López Rodó. Los planes
tenían dos líneas de actuación: las acciones estructurales pretendían solucionar deficiencias de la industria y los polos de desarrollo tenían que reducir los desequilibrios regionales promoviendo nuevas empresas en zonas de escasa industrialización. La intención del régimen con el desarrollismo era crear una clase media amplia. José Luis Sampedro concluye que la economía española mejoró no gracias a los planes de desarrollo sino a pesar de ellos, porque mejoró en el contexto de una época de bonanza en el mundo occidental.
TEJERO
El documento es una fotografía en blanco y negro de la ocupación del congreso por los golpistas el 23 de Febrero de 1981. Es por tanto una fuente primaria, de temática política y de carácter público. La finalidad consiste en en difundir por todo el país el secuestro por parte de los golpistas del gobierno y de los diputados presentes en Parlamento. La imagen muestra un grupo de guardias civiles armados en el Congreso de los Diputados. Subido a la tribuna aparece el cabecilla del golpe, el teniente coronel Antonio Tejero, que con el brazo en alto y la pistola desenfundada en la mano derecha se dirige a sus presentes llamando su atención, se encuentra rodeado de guardias civiles, todos armados con fusiles y apuntando a los diputados. Al fondo de la fotografía se observan a un grupo de periodistas y fotógrafos que tratan de esconderse ante la actitud acobardada aparece en primer plano en el ángulo inferior derecho, se trata del vicepresidente del gobierno, el general Manuel Gutiérrez Mellado, el cual se enfrentó a los golpistas demostrando a su valentía y su imitación ante la ocupación del gobierno.La imagen dio la vueñta al mundo demostrando los frágil que era la democracia en España. La contemplación de un grupo de guardias civiles armados disparando contra el techo y secuestrando el gobierno en funciones y a los disputados hacía recordar épocas que se creían superadas. Y es que ene el año 1981 existían sectores importantes en las fuerzas armadas y del orden público con una ideología de extrema derecha y con recuerdos nostálgicos del franquismo. Se presentó como un modelo de modernización al entrar en la OTAN. El ejército español no se había producido a pesar de los intentos iniciales de la UCD. La transición se dará como concluida cuando el PSOE obtenga la victoria de las elecciones de 1982. Será este partido al que a través de su Ministerio de Defensa Narcís Serrá consiga despolitizar el ejercito, tarea completada durante el primer gobierno de Aznar. Este hecho junto a la noción de la censura socialista, motivaron el desgaste del presidente del gobierno de Adolfo Suárez, que dimitíó en Enero de 1981.