Sociedad ilustrada

Revolución industrial en España:


La revolución industrial española fue más tardía y menos potente que la del resto de Europa occidental. Las causas hay que buscarlas en la inestabilidad política, las destrucciones de la guerra de la Independencia y de las guerras carlistas, y en la inexistencia de una burguésía moderna y abundante que prefirió invertir en la compra de tierras (desamortizaciones) antes que en la industria.

En España la industrialización no alcanzó un gran desarrollo, y la agricultura siguió siendo el sector más importante de la actividad económica; tampoco el régimen parlamentario logró una estabilidad firme, falseado por la práctica del caciquismo, y la burguésía no tuvo la fuerza de la europea. Por otra parte, el retraso con que se inició el proceso de modernización impidió alcanzar los niveles europeos y hace que se hable del “atraso” o “fracaso” del modelo de industrialización español.

No obstante, a finales de Siglo XIX la economía se modernizará y se producirá un gran desarrollo de la industria textil catalana y de la siderurgia vasca. Comenzó la explotación de minas a gran escala en manos de compañías extranjeras y mejoraron las comunicaciones con la creación de la red de ferrocarriles y la ampliación y mejora de las carreteras.

Corrientes ideológicas en España:


Los movimientos que más trascendencia han tenido son el marxismo y el anarquismo, que se desarrollaron en la segunda mitad del Siglo XIX.

– El marxismo (Karl Marx) era un socialismo revolucionario. Su ideología partía de que la clase burguesa estaba explotando a la clase obrera (proletariado) mediante la apropiación de la plusvalía del trabajo. Los obreros deberían tomar conciencia de dicha explotación, organizarse en partidos y sindicatos de clase y, cuando el sistema capitalista entrara en crisis, conquistar el poder y establecer una dictadura del proletariado como paso previo a un Estado que controlara los medios de producción y regulara las condiciones laborales.

– El anarquismo partía de la base de que el Estado era el sostén de la clase burguesa y de que había que destruirlo para alcanzar la libertad. Deberían desaparecer el Estado, la Iglesia, la “familia burguesa” y la propiedad privada. El individuo libre y responsable se organizaría en comunas autogestionarias. Dentro del anarquismo surgieron dos corrientes distintas: una pacifista que se basaba en los sindicatos asamblearios y en la expansión de sus ideas, y otra partidaria del terrorismo.


Industria textil catalana

El sector textil del algodón alcanzó gran importancia en Cataluña en el Siglo XIX debido a la abundancia de mano de obra, la mentalidad empresarial y política proteccionista, pese a la escasez de carbón y la reducida demanda por la pobreza de la población; pues era el único sector que puede considerarse industrializado. Por otra parte, la industria de la lana tuvo gran importancia, así́ como la de la seda cuyos centros se trasladaron a Cataluña. Además, es en Cataluña donde la iniciativa empresarial de la burguésía hará llegar las primeras máquinas de hilado inglesas y donde por vez primera se instalan motores de vapor.


Socialismo

sistema político, económico y social surgido en el Siglo XIX en el que centra sus bases ideológicas en la defensa de la propiedad colectiva frente a la propiedad privada de los medios productivos y de distribución de bienes por parte del Estado. La fuerza socialista más importante de España será el P.S.O.E fundado en 1879


Anarquismo

doctrina política que pretende la desaparición de la propiedad, del Estado y de sus organismos e instituciones representativas. Su líder más importante será Bakunin (s. XIX). Crearán sindicatos “apolíticos” y serán partidarios de la acción directa. La meta es conseguir una sociedad organizada en pequeñas comunas y que tengan como principio básico la libertad individual. En España serán muy importantes a partir de 1909. Las organizaciones más poderosas son la C.N.T. (Confederación Nacional de Trabajadores) y la F.A.I. (Federación Anarquista Ibérica).


Nacionalismo

doctrina y movimiento políticos que reivindican el derecho de una nacionalidad a la reafirmación de su propia personalidad mediante la autodeterminación política. La política centralista creada por Cánovas originó el nacimiento de partidos políticos nacionalistas y regionalistas que acusaban a la burguésía centralista que había dirigido el país de ineficaz, y reclamanban diferentes grados de autonomía e incluso independencia para sus territorios. Los más importantes fueron los partidos nacionalistas catalanes y vascos.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *