Sociedad y economía en el Antiguo Régimen

Vocabulario:

– Enfitéuticos: estables y a perpetuidad en Cataluña.

– Foros: Contrato fijo durante 3 generaciones en Galicia y Asturias.

– Subforos: derivado de la división de parcelas arrendadas en foros en Galicia y Asturias.

– Latifundio: finca rústica de gran extensión.

– Minifundio: finca rústica de reducida extensión.

– Intensiva: el ganado se encuentra estabulado en condiciones artificiales con el objetivo de incrementar la producción.

– Extensiva: consiste en la cría y mantenimiento de los animales en extensiones más o menos amplias por las que los animales vagan con libertad.

– La Mesta: Asociación ganadera a la que se otorgaron privilegios reales y una fiscalización especial para protegerla de los agricultores.

– Amortizar: pasar los bienes a manos muertas.

– Mayorazgo: institución del derecho civil que tiene por objetivo perpetuar en la familia la propiedad de ciertos bienes.

– Ilustración: movimiento cultural europeo. La característica básica de este pensamiento es una ilimitada confianza en la razón. Critican los principios en los que se basaba la sociedad estamental.

– Despotismo: Forma de gobierno donde los ilustrados aceptaron que la debilidad de la burguesía y la ignorancia de las clases populares hacían imposible cualquier programa de cambio que no fuera asumido por un monarca.

– Separación de poderes: distribución de las funciones del Estado, en la cual la titularidad de cada una de ellas es confiada a un órgano público distinto. Para no caer en la tiranía.

– Soberanía popular: sostenía la participación de todos los ciudadanos varones en la vida política mediante el sufragio universal.

– Centralización: concentración de funciones políticas o administrativas de las que son propias de poderes locales, por parte de un poder central.

– Uniformidad: igualdad, continuidad o falta de cambio.

– Economía señorial: el señor feudal cedía una parte de sus tierras al campesino, a cambio de rentas y derechos.

Comentario de texto:

1) Clasificación:

– Nos encontramos ante una fuente (histórica/historiográfica) de naturaleza (política, económica, jurídica, social, religiosa). Se trata de un texto escrito por… en el año…, perteneciente al bloque temático…

– Este texto habla sobre (breve resumen)

2) Contextualización: Crear un marco general del periodo histórico. Introducción del tema.

3) Análisis: debemos demostrar que somos capaces de interactuar entre nuestros conc. Explicar el significado del texto en su contexto histórico.

– Las ideas principales del texto son:…

– Explicar cada una de ellas.

4) Síntesis: explicar temas anteriores y posteriores.

Sociedad y economía del Antiguo Régimen

2.1. Pervivencia de la sociedad estamental.

La sociedad del siglo XVIII estaba dividida en estamentos y sus características esenciales eran la desigualdad jurídica y el inmovilismo. Los privilegiados eran dueños de la mayor parte de la propiedad territorial, no pagaban impuestos y ostentaban cargos públicos. El clero controlaba más del 40% de la propiedad territorial. La nobleza, que se pertenecía por nacimiento, no sobrepasaba el 5% de la población, aunque poseía extensas propiedades y detentaba numerosos señoríos, en los que administraba justicia y de los que extraía cuantiosas rentas.

El tercer estamento estaba compuesto por el resto de los habitantes del reino. Soportaba la mayor parte de las cargas económicas del Estado y se hallaba marginado de las decisiones políticas. Los campesinos, la inmensa mayoría de la población, continuaban sometidos a un régimen señorial que les obligaba a entregar la mayor parte de sus rentas agrarias, manteniéndoles en el límite de la supervivencia.

– El poder de la nobleza y el clero había impedido el desarrollo de la burguesía comercial e industrial. La mejora de la actividad económica permitió su crecimiento a lo largo del siglo, aunque su peso e importancia no sobrepasaban el ámbito de algunas ciudades dedicadas al comercio.

2.2. Una economía agraria.

La agricultura era todavía la fuente esencial de riqueza, y a ella se dedicaba más del 80% de la población. La mayor parte de la tierra estaba amortizada, se transmitía en herencia. Así sucedía con las tierras de la Iglesia, de los nobles, en cuyos patrimonios era habitual la institución del mayorazgo, que en el siglo XVIII se extendió a los plebeyos enriquecidos.

La propia Corona, la nobleza y la Iglesia continuaban siendo los titulares de los señoríos, extensas posesiones sobre las que ejercían jurisdicción y de las que recibían cuantiosas rentas. La mayor parte de la tierra cultivable estaba fuera del mercado.

Aunque existían agricultores propietarios de sus tierras, sobre todo en Cantabria, Asturias, Melilla, País Vasco y el norte de Castilla, la mayor parte del campesinado era arrendatario o jornalero. La condición de estos campesinos variaba según las zonas y el tipo de contrato al que estaban sujetos.

– En Cataluña, la mayoría de las tierras era de señorío laico o eclesiástico, de mediana proporción y cultivada por campesinos con contratos enfitéuticos, estables y a perpetuidad. No estaban sometidos a aumentos de renta y se beneficiaban del crecimiento de los rendimientos agrarios.

– En Galicia y Asturias, los arrendamientos (foros) eran fijos durante 3 generaciones, la falta de tierras originó la subdivisión de estos foros (subforos) y un problema de minifundismo.

– En gran parte del sur de Castilla, Extremadura y Andalucía existían enormes extensiones (latifundios, fincas rústicas de gran extensión) en manos de la nobleza y el clero, trabajadas por campesinos en arriendos a corto plazo. Las condiciones para el campesinado eran muy duras, si se trataba de arrendatarios, no podían nunca acumular un mínimo excedente; si eran jornaleros, dependían de un mísero salario. Además, la ganadería ovina extensiva todavía era muy fuerte. Los grandes propietarios poseían enormes rebaños que les proporcionaban importantes beneficios.

2.3. La debilidad de la industria y el comercio interior.

– En el Antiguo Régimen, la artesanía y el comercio eran sectores económicos subsidiarios del mundo agrario. La industria tradicional continuaba organizada de forma gremial, con un estricto control sobre la producción y la creación de nuevas industrias.

– Al comercio, el mercado interior era débil y escaso, limitado en su mayoría a los intercambios de tipo local. Existían graves problemas de transporte y las zonas del interior peninsular estaban aisladas. Pero el problema más serio se derivaba de un mercado sometido a los límites de una economía agraria, donde los escasos excedentes de los que podían apropiarse los campesinos apenas alcanzaban para la compra de los productos más indispensables. Sólo el comercio colonial mantenía una cierta importancia que permitió una reactivación de las transacciones con América.

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