6.2.El capitalismo industrial

Los beneficios obtenidos del campo la Industria y Comercio dieron lugar a que a mediados del Siglo XIX se acumula son enormes capitales en manos de inversores que invierten su dinero en nuevas iniciativas empresariales. Algunas de estas empresas dominaron el mercado gracias a la creación de grandes compañías.
El capital lo solían aportar varios inversores en formas de acciones y limitaba los beneficios y la capacidad de decisión y rebajaba las responsabilidades y amortigua valor riesgos económicos. Otra consecuencia el incremento de capital crecimiento de las inversiones exteriores. Estas inversiones extranjeras supusieron un fuerte impulso para la industrialización de terceros países.Se profundizó en la economía mundo dominada por Europa y en la que incluso los precios de los productos se calcula van en función del comercio mundial. El capital y la consolidación de las inversiones en el extranjero aceleraron el desarrollo nuevos sistemas financieros. Se generalizaron los bancos que custodiaban los ahorros de sus clientes y gracias a las inversiones y los créditos estrecho la relación entre empresas y banca.Londres se convirtió en el centro financiero mundial. Con todos estos cambios el mercantilismo capitalismo comercial que había dominado Europa en los últimos siglos sustentado en el control y la protección del Estado dejó paso al capitalismo industrial una nueva estructura de la economía que coincidía con los ideales de liberalismo político británico

. 7.Los rasgos sociales de la industrialización. 7.1. Las condiciones laborales de la industrialización:

la desaparición progresiva de los gremios y de las leyes que regulaban los oficios fueron deteriorando las condiciones de vida y de trabajo de las clases trabajadoras. En Reino Unido la Cámara de los Comunes ofrecía la burguésía un espacio propicio para legislar en defensa de sus intereses de modo que los trabajadores fueron cayendo en una situación de desprotección ante la ausencia legislación o ante su incumplimiento por parte de muchos empresarios.Las condiciones laborales quedamos reflejadas en jornadas que se prolongaban hasta 14 horas diarias sin derecho a días de descanso y durante las cuales los trabajadores carecían de las más elementales garantías de seguridad e higiene. La abundancia de mano de obra y el empleo de trabajo de escasa cualificación facilitaba no más la explotación que alcanzaba sus cotas más elevadas en el caso del trabajo infantil. Ha estado duro panorama se sumaban los bajos salarios que apenas permiten la subsistencia. Para salir adelante las familias necesitaba una aportación de todos sus integrantes mujeres niños incluidos cuyos salarios eran significativamente inferiores.La desnutrición sumado a la falta de condiciones higiénicas derivaba en enfermedades como el raquitismo en epidemias como el colera y tuberculosis el tifus. En estas circunstancias proliferó la marginalidad cuyo reflejo más evidente era el grave problema del alcoholismo como también lo era la proliferación de focos de delincuencia de prostitución en los barrios bajos de las ciudades europeas y americanas

. 7.2.El nacimiento de la conciencia obrera

Las duras condiciones de vida que trajo la industrialización estuvieron en el origen de los primeros focos de protesta obrera, serían los obreros británicos los primeros que dieron muestras de conciencia de clase pero hubo además otros factores

.- la economía moral de la multitud

En el Siglo XVIII la economía se veía condicionada por ciertos valores contrarios al librecambismo el beneficio limitado se identificaba con la usura y los precios de productos básicos exigen un control estatal que evitase motines populares.

-la tradición del inglés nacido libre

desde la revolución de 1688 de se había extendido la conciencia liberal y democrática. Asociaciones radicales de trabajadores se opusieron a la explotación de las paupérrimas condiciones de vida.

-la influencia del metodismo

Esta corriente del protestantismo aglutinó a los trabajadores urbanos y el campesinado pobre entre ellos extendieron prácticas culturales y sociales basadas en el comunitarismo.

7.3. Los inicios del movimiento obrero

Los trabajadores urbanos y los mineros constituir una nueva clase social el proletariado, la clase proletaria no tardo mucho en ser consciente de la necesidad de asociarse para exigir los cambios que llevarán al fin de la explotación industrial. A comienzos del Siglo XIX surgiría el movimiento ludita que culpaba del paro artesanal al maquinismo en una reacción instintiva amenazaron a los empresarios y destruyeron muchas máquinas. A finales del Siglo XVIII el Parlamento prohibíó la constitución de asociaciones obreras en Gran Bretaña de modo que no fue hasta 1824 cuando las protestas los trabajadores lograron al reconocimiento legal de los sindicatos. Se forjó así una conciencia que daría lugar al movimiento obrero que se extendíó en las décadas siguientes entre los países industrializados hasta llegar a convertirse en uno de los principales actores sociales y políticos de la sociedad industrial.