Turno de partidos

12.6. LA REGENCIA DE MARÍA CRISTINA DE HALSBURGO Y EL TURNO DE PARTIDOS. LA OPOSICIÓN AL SISTEMA. REGIONALISMO Y NACIONALISMO


La temprana muerte de Alfonso XII, en 1885, por tuberculosis (enfermedad común en la época) hace que se de la Regencia de María Cristina de Habsburgo hasta que su hijo sea mayor de edad.    Tras la muerte del rey, los líderes de los partidos:
Cánovas (conservador) y Sagasta (liberal) firmar el pacto del Pardo, donde establecen de nuevo el sistema de turnos del partido en el poder.     Este sistema se llevó a cabo mediante una “escenificación”: cuando el gobierno llevaba 3 o 4 años en el poder, el otro partido comenzaba a manifestarse. Meses después, la Regente mostraba su descontento con el gobierno y nombraba a uno nuevo. A la vez, se hacían elecciones para formar un nuevo parlamento en el que quedaba garantizado una minoría de diputados para el grupo de la oposición.   Durante la Regencia se aprobaron una serie de leyes que liberalizaron el sistema político, incluso se aprobó el sufragio universal  masculino. Sin embargo, el sistema político se siguió basando en el caciquismo.          El caciquismo se basaba en que el cacique (persona con influencia en su zona) le pedía favores al gobierno y así le podía conceder favores al pueblo para poder conseguir los votos de esa población. De modo que con esto, el gobierno buscaba ganar las elecciones, jugando con los favores y las expectativas que estos creaban en el pueblo.      Sin embargo, esta Regencia encontró oposición en varios grupos: los republicanos que defenderían la democracia y seguían divididos en federales y centralistas (tenían diferentes formas para llegar a la república).Los republicanos tenían algo de poder en las grandes ciudades donde el voto era más libre (casi no había caciquismo). Además, en esta época empezaron un proceso de modernización:
Incluyeron aspectos sociales en su programa para atraer a los trabajadores (campesinado) y empezaron a crear partidos políticos de masas.      Otro grupo que se opone es el PSOE (que se fundó en esa época). Éste busca la abolición de clases mediante: la emancipación de los trabajadores, transformando la propiedad privada en social, el poder reside en la clase trabajadora, libertades políticas (coalición, libertad de huelgas), reducción de la jornada laboral, leyes que protegen la salud y la vida del trabajador, medios de transporte y circulación, democracia y sufragio universal masculino. Pero el PSOE en esta época, es un partido muy minoritario, que solo tuvo más fuerza en el País Vasco.     Mucho más importante fue el partido anarquista.
El anarquismo defendía sobre todo la libertad y se opuso a todo aquello que la limitará como el estado (leyes y policía), la religión (limita la libertad de las personas por los preceptos que tiene), la propiedad privada (impide disfrutar de los recursos, pasar a ciertos sitios, etc.) y por lo tanto, todo esto debía ser destruido. Sin embargo, el anarquismo cree en la organización: el hombre es cooperativo y debe vivir en sociedad. Entonces, defiende una organización social, voluntaria y libre.
Y para llegar a ella utilizaron dos vías: la propaganda por el hecho (vía terrorista) consistía en el uso de la dinamita para matar a un personaje importante, que se produjera una crisis en el gobierno y así el pueblo iniciase una revolución; y la otra vía fue el sindicalismo revolucionario, que consistía en crear sindicatos y fortalecerlos (afiliando a más trabajadores). De forma que cuando fueran muy fuertes se pudiese hacer una huelga general, que paralizara el sistema y acabase con él.          En esta época también surge el regionalismo y el nacionalismo.

El regionalismo es un movimiento que reivindicaba la existencia de ciertos territorios, sus peculiaridades culturales y sus mejoras económicas. Surge en Andalucía, Cataluña, Valencia, Galicia y el País Vasco. Y el nacionalismo parte de la idea de que ciertas poblaciones constituyen una nación.
Creen que estas poblaciones tienen derecho a autogobernarse, bien siendo autónomos dentro de un estado o bien teniendo un estado propio.          
En esta época, poco a poco, fue surgiendo un nacionalismo español que se manifestó en el momento de la perdida de Cuba y Puerto Rico, ya que, incluso se llegó a hablar de la generación desastre (generación del 98). Dentro del nacionalismo hubo una vertiente más conservadora (unía España y el catolicismo) y otra más liberal (también definía una única nación pero menos excluyente).      Sin embargo el nacionalismo español tuvo limites debido a que faltaban varios instrumentos nacionalizadores:
Uno de estos era la escuela, el problema era la falta de asistencia de los niños, por lo que no se podía crear la idea de nación; y el otro fue el ejercito donde tampoco iba toda la población, ya que se podía pagar para no hacer el servicio militar por lo tanto, tampoco se podía crear el sentimiento de nación.        Además del nacionalismo español, surgen dos nacionalismos alternativos: el vasco y el catalán. Ambos tenían varios elementos para constituir un nacionalismo propio: lengua propia, historia de independencia (corona de Aragón, fueros,…). El nacionalismo catalán fue autonomista, en el que primaba la idea de que Cataluña era la zona más avanzada de España y sentían la necesidad de regenerar al resto del país. Este fue defendido por la burguesía catalana, este tipo de nacionalismo no es racista, ya que planteaba un autogobierno en el que solo podrán ocupar cargos políticos los catalanes, pero en el resto de los aspectos están abiertos a España.

El nacionalismo vasco era un nacionalismo independentista con elementos racistas basados en el concepto de raza vasca. Fue defendido principalmente por las clases más bajas, sobre todo los campesinos. Los nacionalistas vascos rechazaban lo exterior (la industrialización, la inmigración, la llegada masiva de mano de obra con nuevas costumbres, nuevos idiomas).

En relación con estos nacionalismos, surgen en esta época los primeros partidos políticos nacionalistas, todavía muy minoritarios:
PNV (vasco) y la Lliga Regionalista de Cataluña.

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