1. INTRODUCCIÓN
Tras la Paz de Zanjón (1878), los Cubanos esperaban de la administración española una serie de reformas pero no se cumplieron debido a los grandes propietarios peninsulares.
Siguiendo el modelo bipartidista de la península, se crearon en Cuba dos grandes partidos:
El Partido Autonomista (Partido Liberal Cubano), integrado en su mayoría por cubanos.
Pedía la autonomía para la isla y una serie de reformas sin llegar a la independencia.
Uníón Constitucional. Un partido españolista que contaba con una fuerte militancia de los peninsulares instalados en la isla.
La administración no introducíó reformas y aumentó sus ganas de independentismo.
En 1893, José Martí, funda el Partido Revolucionario Cubano (objetivo la independencia) que de inmediato consiguió apoyo exterior (EEUU). En el movimiento independetista hay que destacar a Máximo Gómez, Antonio Maceo y Calixto García
En 1891, el gobierno español elevó las tarifas para los productos importados a la isla que no procediesen de la península. Lo que hacía que EEUU (principal cliente de Cuba) tuviese que pagar más por los productos cubanos (azúcar y tabaco). El presidente norteamericano se queja y amenaza con cerrar las puertas del ese mercado si el gobierno español no modificaba esa situación.
2. LA GRAN INSURRECCIÓN. LA INTERVENCIÓN DE Estados Unidos.
En 1879 se produce la Guerra Chiquita, pierden los mambises (insurrectos cubanos) debido a la superioridad española.
En 1895 el Grito de Baire. El jefe del gobierno español, Cánovas del Castillo, envió un ejército al mando de Martínez Campos.
Martínez Campos no consigue controlar la rebelión y es sustituido por el general Weyler, que inició una fuerte represión. Weyler trató muy duramente a los rebeldes, aplicaba la pena máxima a muchos y además eran víctimas del hambre y epidemias.
En el plano militar la guerra no era favorable para los soldados españoles, ya que se desarrollaba en plena selva. Eso, además de otras desdiches, causaron gran mortandad entre las tropas, alejándoles así la victoria final.
Tras el fracaso de Weyler, le sucede el general Blanco e inició una estrategia de conciliación. Pero las reformas llegaron demasiado tarde, ya que los independentistas se negaron a aceptar el fin de las hostilidades españolas.
La guerra hispano-norteamericana. El presidente McKinley (EEUU) enviaba armas por vía marítima a Cuba. El 15 de Febrero de 1898 estalló en el puerto de La Habana el acorazado estadounidense Maine. EEUU acusó falsamente los españoles y envió a España un ultimátum (exigía la retirada de Cuba). El gobierno español negó cualquier vinculación con el Maine y rechazó el ultimátum estadounidense, amenazando con declarar la guerra en caso de invasión de la isla.
Una escuadra mandada por el almirante Cervera partíó hacia Cuba y es derrotada en la batalla de Santiago (España se enfrentaba contra una tecnología superior y más nueva).
En Diciembre de 1898 se firmó la Paz de París (España abandona Cuba, Puerto Rico y Filipinas).
3. CRISIS POLÍTICA Y MORAL. EL REGENERACIONISMO
Aunque la guerra trajo pérdidas materiales las repercusiones fueron menores de lo esperado (el sistema del turno dinástico de la Restauración sobrevivíó).
La crisis fue moral e ideológica y causó un importante impacto psicológico en la población.
Significó la destrucción del Imperio español (España como potencia secundaria)
La prensa extranjera presentó a España como una “nacíón moribunda”, con un ejército ineficaz y un sistema político corrupto.
Regeneracionismo (Joaquín Costa). Corriente que hablaba con insistencia de la regeneración de España. Decía que había que enterrar las glorias pasadas (había que “cerrar con siete llaves el sepulcro del Cid”) y defendía la necesidad de elevar el nivel cultural y educativo del país (“escuela y despensa”).
La Generación del 98 intentaron analizar “el problema de España” en un sentido muy crítico y en tono pesimista. Estos querían llevar a cabo una regeneración de la cultura pero no se llevaron a cabo finalmente.
El Ejército:
El ejército es acusado de tener gran responsabilidad en el desastre.
El ejército atribuye la derrota a la corrupción de los políticos.
Los militares se iban entrometiendo en el poder hasta que se lleva a cabo el Golpe de Estado de Primo de Rivera (1923). Este inauguró una dictadura de siete años.
Más tarde el general Franco (1936), provoca una Guerra Civil que acaba con una dictadura de casi cuarenta años.