Ab. La Rusia de los Zares
Un Imperio inmenso y atrasado
-El Imperio ruso estaba organizado en forma de autocracia bajo el poder absoluto del zar; que sus pilares fundamentales eran la burocracia, el numeroso ejército y la iglesia ortodoxa.
– La rusa era una economía agraria en la que existen dos formas de propiedad; propiedad comunal (mir) y propiedad privada en manos de la nobleza y de otra clase de propietarios menores, los kulaks. Pese a sus abolición en 1861, todavía persiste servidumbre. Era una agricultura atrasada y de baja productividad.
-En la parte más occidental del Imperio había ido penetrando el capitalismo, y se había iniciado un proceso de industrialización y había una importante presencia de capital extranjero (francés).
-La industrialización supuso el nacimiento de una importante clase obrera, que en buena parte eran campesinos emigrados, cobraban salarios bajos y viven en condiciones precarias.
El crecimiento de la oposición
-La industrialización supuso la entrada de nuevas ideas como el liberalismo y doctrinas obreristas como el anarquismo y el marxismo.
-Surgen movimientos de carácter populista entre los cuales arraigó el anarquismo, que defiende el reparto de tierra entre los campesinos y la acción directa.
-Se crean partidos liberal-burgueses como el KDT y el Social-Revolucionario.
-Bajo la influencia marxista se creó el Partido Social-demócrata Ruso con Lenin como líder más destacado y que terminará dividido en dos ramas: Bolcheviques (mayoritarios) eran defensores de la revolución socialista. Mencheviques (minoritarios) eran partidarios de una revolución burguesa previa.
La revolución de 1905
– En el reinado de Nícolás II aumenta la agitación social y política agravada por la guerra ruso-japonesa en 1904.
-En Enero de 1905 estalla una revolución contra el régimen zarista y las injusticias sociales, en la que participan todos los grupos de oposición, hubo una dura represión por parte del ejército que da lugar al llamado Domingo sangriento, y destaca el motín del acorazado Potemkin.
-En zar se ve obligado a conceder tímidas reformas económicas y políticas, donde se convoca una Duma (Asamblea Legislativa) y se propone una reforma agraria.
-Estas reformas están lejos de transformar las estructuras sociales y políticas del Imperio.
La Rusia de los Zares
Un Imperio inmenso y atrasado
-El Imperio ruso estaba organizado en forma de autocracia bajo el poder absoluto del zar; que sus pilares fundamentales eran la burocracia, el numeroso ejército y la iglesia ortodoxa.
– La rusa era una economía agraria en la que existen dos formas de propiedad; propiedad comunal (mir) y propiedad privada en manos de la nobleza y de otra clase de propietarios menores, los kulaks. Pese a sus abolición en 1861, todavía persiste servidumbre. Era una agricultura atrasada y de baja productividad.
-En la parte más occidental del Imperio había ido penetrando el capitalismo, y se había iniciado un proceso de industrialización y había una importante presencia de capital extranjero (francés).
-La industrialización supuso el nacimiento de una importante clase obrera, que en buena parte eran campesinos emigrados, cobraban salarios bajos y viven en condiciones precarias.
El crecimiento de la oposición
-La industrialización supuso la entrada de nuevas ideas como el liberalismo y doctrinas obreristas como el anarquismo y el marxismo.
-Surgen movimientos de carácter populista entre los cuales arraigó el anarquismo, que defiende el reparto de tierra entre los campesinos y la acción directa.
-Se crean partidos liberal-burgueses como el KDT y el Social-Revolucionario.
-Bajo la influencia marxista se creó el Partido Social-demócrata Ruso con Lenin como líder más destacado y que terminará dividido en dos ramas: Bolcheviques (mayoritarios) eran defensores de la revolución socialista. Mencheviques (minoritarios) eran partidarios de una revolución burguesa previa.
La revolución de 1905
– En el reinado de Nícolás II aumenta la agitación social y política agravada por la guerra ruso-japonesa en 1904.
-En Enero de 1905 estalla una revolución contra el régimen zarista y las injusticias sociales, en la que participan todos los grupos de oposición, hubo una dura represión por parte del ejército que da lugar al llamado Domingo sangriento, y destaca el motín del acorazado Potemkin.
-En zar se ve obligado a conceder tímidas reformas económicas y políticas, donde se convoca una Duma (Asamblea Legislativa) y se propone una reforma agraria.
-Estas reformas están lejos de transformar las estructuras sociales y políticas del Imperio.